Un análisis callejero: rebelde, agitador y revolucionario

0
1651
callejeros 3

callejeros 3El Tribunal Oral en lo Criminal 24 dispuso recientemente la excarcelación de los integrantes de la banda Callejeros, luego de que la Corte Suprema ordenara que el expediente vuelva a la Cámara Federal de Casación Penal y que se dicte una nueva sentencia. También serán liberados el exmano derecha de Omar Chabán, Raúl Villarreal, y los exfuncionarios porteños. Chabán, exgerenciador de Cromañón, y el subcomisario Carlos Díaz tienen condena firme y seguirán presos.

En la última nota escrita por la conmemoración del 9no aniversario de la fatídica noche en la que 194 almas perdieron sus vidas, pedíamos por la liberación de los músicos y prisión para empresarios, funcionarios y políticos responsables. (ver: Militante N° 77).

En primer lugar no estamos de acuerdo con la liberación de los funcionarios porteños involucrados, ya que creemos en su responsabilidad como garantes de la seguridad de los distintos complejos y boliches de la Ciudad fue vulnerada por sus acciones corruptas.

En aquella nota tratábamos de razonar bajo el sujeto histórico y material que la banda en su condición de músico, por ende trabajador, sufre como consecuencias del accionar de empresarios bolicheros y discográficas que sólo intentan, como todo capitalista, incrementar su capital.

En esta nota se analizará a Callejeros en su conducta social y en la necesidad de avanzar hacia el control de la cultura por parte de quienes son sus creadores: los trabajadores de la cultura.
La cultura bajo control de sus trabajadores

Los marxistas del mundo intentamos vencer las superestructuras del sistema capitalista, pero para avanzar en esa lucha es de real importancia lograr el control de los rasgos naturales de la condición humana, por esto creemos que la cultura y los medios de comunicación deben ser controlados por el cantante de barrio, el pintor de la esquina, el actor de la plaza, el fotógrafo del club y el redactor de los medios, para que se creen historias nuevas que se asemejen más a las realidades cotidianas, las dificultades económicas y los amores verdaderos de los laburantes de barrio, desde las problemáticas educativas, y las historias de lucha en los distintos lugares de trabajo, que se cante o que escriba teniendo como único objetivo inculcar la importancia de la verdad, la justicia y el amor por sobre las mercancías y el afán de poder.

Los empresarios de la música, el teatro y los medios de comunicación, sólo intentan contener con su basura mediática, sus historias de principitos millonarios y cantantes del materialismo, el control de la cultura de los pueblos…los músicos, actores, pintores etc. deben organizarse bajo un sindicato único y construir lo que el Che Guevara planteaba… una radical y transformación de la conciencia, los valores y las costumbres en la construcción del “HOMBRE NUEVO”

Rock and Roll

Para la cultura hegemónica este género de música implica el sexo, las drogas y el descontrol, para los marxistas el rock and roll, implica un grito de lucha contra la opresión del sistema.

Es por eso que admiramos a un Indio Solari, a quien le escribimos que es el ídolo de los olvidados, que con lengua de poeta grita al cielo las historias de pequeños héroes de barrio…(ver Banderas Rojas en tu Corazón). Y a unos Callejeros, que con su sonido oxidado y a veces distorsionado nos invadían la garganta en el grito desesperado por la libertad.

Pero a la vez Callejeros habla del sexo, de las drogas y el descontrol desde una postura social, real y cotidiana.

Habla del pibe de barrio, a veces laburante, a veces atorrante, del amor para siempre o fugaz de una mujer y de los vicios cotidianos y suburbanos.

Por eso Callejeros sin ser un Silvio Rodríguez o el mismísimo Indio Solari, penetraron la piel y llenaron las gargantas de los aún más olvidados que el Fantasma de Canterville, “los invisibles” de la historia.
Callejeros

A veces de Celina, a veces de Boedo o Pompeya, a su cabizbaja postura Matancera la enfrentaban con su rugido y potencia del laburante de Tapiales, Casanova, Dock Sud o Rafael Castillo.

Los años de purretes bajo el despilfarro del neoliberalismo y sus injusticias sociales marcaban sus pechos y cargaban sus gargantas.

La crisis del 2001 termina de desatar ese nudo y se hace eco, en las gargantas de muchos jóvenes que intentábamos comprender este mundo que nos abofeteaba en la cara, quienes veíamos en el rostro de nuestros padres los ojos llorosos disimulados en una sonrisa de quienes acababan de perderlo todo, de quienes el pan que había ayer no existía más sobre la mesa.

El control hegemónico y los medios de comunicación

Las letras de sus canciones de disco en disco relatan las relaciones del mundo real con un irreal dominio hegemónico de la cultura.

En la nota de nuestra prensa Nro 80 escrita por el compañero Franco Bogado, titulada ¿Somos quienes creemos ser? se escribió acertadamente que el capitalismo bajo las armas de la comunicación intentan socializar morales ligadas a un control hegemónico por parte de la clase dominante transformando nuestro rasgo natural de lucha y liberación en uno controlado por la cultura del capital volviéndonos pastes de su mercancía.

Para este intento de control cultural para marcar la moral, callejeros es un grano en el culo del sistema.
Tendría que llenar este texto con todas las letras de sus canciones para que se observe, el rasgo natural de sus gritos de lucha…

Los medios de comunicación como parte de la estructura del control hegemónico dominante lo saben y atacan de manera sistemática las mentes de la sociedad para culpar a los trabajadores y defender los intereses de sus funcionarios a sueldo.

La liberación tal cual dice Patricio Santos Fontanet sufre de una total mediatización transformándolos en la pantalla de distracción para cubrir las falacias de un sistema corrupto y criminal.

Casi sin Justicia Social

La posibilidad de algunos músicos de poder seguir rugiendo, le da una responsabilidad aún mayor que la necesidad de ejercer su trabajo para ganarse el pan.

La voz de la nueva banda debe agradecer las contantes movilizaciones que mes a mes hacían miles de jóvenes por su libertad y superarlas bajo la organización de músicos y trabajadores de la cultura para lograr la liberación de nuestras mentes en la lucha final por un mundo mejor…luchar por la liberación de la cultura es luchar por el socialismo.

Un final llano y liso final
es lo que buscás, es lo que agitás
las noches de falsas victorias, terminarán
Sonreir, solo y por placer
No hay tiempo ni espacio
no hay a mundo ni fé…ni fé
Porque lo que empieza acaba al fin

La riqueza de este viaje
es el cambio a esta realidad
porque si muero es por luchar
y no por mirar
No olvidar, siempre resistir

Que la idea sea el sol, que al milagro lo cambien
y se haga verdad
No empezar a dejar de pensar
que a las masas pensando
no las venceran jamás…jamás