Las declaraciones del electo Jefe de Gobierno de la Ciudad, Mauricio Macri, con respecto a los “ñoquis”, el déficit cero y los despidos de los contratados, refleja y, no queda duda, que este modelo, va en contra de los intereses del conjunto de los trabajadores. No se puede alegremente anunciar 20.000 despidos, mezclando a “ñoquis” con contratados.
No a los despidos de los trabajadores, sí al pase a planta de contratados
En nombre y representación de la Asociación Trabajadores del Estado, Consejo Directivo Capital Federal , nos dirigimos a los medios de prensa y a la opinión pública en general, para comunicar lo siguiente:
Las declaraciones del electo Jefe de Gobierno de la Ciudad, Mauricio Macri, con respecto a los "ñoquis", el déficit cero y los despidos de los contratados, refleja y, no queda duda, que este modelo, va en contra de los intereses del conjunto de los trabajadores.
No se puede alegremente anunciar 20000 despidos, mezclando a "ñoquis" con contratados.
La responsabilidad de los que gobiernan es garantizar la estabilidad del empleo público, establecer los mecanismos de ingreso para cubrir los puestos de trabajo y tener las herramientas para detectar a quienes no trabajan.
Que Macri no se equivoque: los ñoquis son los familiares y amigos de los funcionarios y los punteros políticos y no los trabajadores precarizados.
Hoy existen casi 12000 trabajadores con contratos de empleo público (Dto.
948) y 7000 contratos de locación que diariamente desarrollan sus tareas en las distintas dependencias de la ciudad y sin las cuales, muchos sectores estarían paralizados sin atender al público.
En este sentido la regularización de los nombramientos en los hospitales, incumplida desde hace más de un año, permitiría solucionar el déficit de atención al público que hoy padecen los efectores e ir solucionando la crisis del sistema sanitario.
Desde ATE ratificamos nuestra histórica bandera para terminar con el trabajo en negro, pasar a planta a todos los contratados y cualquier otra forma de precarización, en un marco de libertad sindical, convocando democráticamente por igual a todos los gremios con representación en el Estado.
El Estado no se saneara despidiendo trabajadores – como en la década de los "90 – sino democratizando las cuentas, a través de un presupuesto participativo, donde intervenga el conjunto de la ciudadanía porteña y con organismos de control de cara a la sociedad.
Los trabajadores no vamos a permitir la hipocresía del PRO, que en la composición actual de la Legislatura son mayoría y nunca acompañaron las propuestas de regularización de empleo público.
POR LA ASOCIACION TRABAJADORES DEL ESTADO
CONSEJO DIRECTIVO CAPITAL FEDERAL
