El Pichi resultó un magnífico constructor de la CTA nicoleña y dirigente del gremio judicial junto al compañero Olmedo.
Supo elevarse a lo mejor de la política revolucionaria. Con la publicación “Del Acero al Agua Bendita”, aportó en claridad y tareas para la clase obrera y su vanguardia en la ciudad del acero, en uno de los episodios más dolorosos de la década de los ’90 para miles de trabajadores y familias obreras, ante la ola de privatizaciones en el país y su episodio en SOMISA.
El Pichi era un compañero entrañable, afectivo y siempre dispuesto. En los Congresos de aquel CC POR, el grupo de compañeros y compañeras que lo integrábamos reinaba una notable camaradería, los lazos se vigorizaban con los planteos políticos y programáticos, ante la adversidad de la avanzada reaccionaria de los ’90 y el Pichi era parte de este buen grupo de camaradas.
En particular tuve la suerte de trabajar políticamente en San Nicolás durante más de dos años, en que compartía con el Pichi casi toda la semana. Recibimos el 19 y 20 de diciembre de 2001 en los pagos somiseros, junto a la organización CITOD, de trabajadores ocupados y desocupados que el Pichi y otros compañeros habían construido.
Son muchos los años que no veía al Pichi, creo que en abril de 2008 fue nuestro último encuentro, en ocasión del conflicto de Motomel en La Emilia, vecina ciudad de San Nicolás. En aquella oportunidad -café mediante- compartimos opiniones sobre la situación en el país y Latinoamérica. No faltó, por supuesto, el ponernos al día de nuestras vidas y nuestra militancia.
Querría seguir escribiendo más de lo que he puesto, pero hoy sale esto.
Quiero recordarlo con esa sonrisa sincera y abierta.
Mando mi más afectuoso recuerdo a sus hijos, su esposa y hermanos de un valioso y querido compañero.
Mando un saludo afectuoso a los compañeros del CCPOR.
¡¡Pichi, siempre estarás presente en las luchas de los trabajadores nicoleños!!
Angel Perouch
ex militante del CC POR
actual militante de la Corriente Socialista Militante
