Con la exitosa participación en las elecciones del 16 de septiembre pasado, la oposición antiburocrática se consolida como herramienta para la recuperación del sindicato de la Alimentación. Se hace necesaria la conformación y coordinación de listas opositoras en todos los sindicatos de la CGT y la CTA, donde participen los trabajadores más luchadores y la izquierda, para desplazar a los gordos y poner a las organizaciones obreras en manos de sus verdaderos dueños.
Gran elección de la lista antiburocrática en Alimentación
Con la exitosa participación en las elecciones del 16 de septiembre pasado, la oposición antiburocrática se consolida como herramienta para la recuperación del sindicato de la Alimentación. Se hace necesaria la conformación y coordinación de listas opositoras en todos los sindicatos de la CGT y la CTA, donde participen los trabajadores más luchadores y la izquierda, para desplazar a los gordos y poner a las organizaciones obreras en manos de sus verdaderos dueños.
Pese a las maniobras fraudulentas tendientes a mantener en el cargo a Rodolfo Daer, prototipo de sindicalismo corrupto, la lista opositora impulsada por trabajadores independientes, la CCC y el PTS triunfó en las grandes empresas del gremio. Lo hizo con más del 50% de los votos en Pepsico, Stani y Bagley, y también se impuso en Terrabusi. En Bonafide y Felfort salió segunda.
La lucha continúa con la impugnación presentada ante el Ministerio de Trabajo denunciando el fraude, también con la próxima elección de delegados en Stani y Bagley, donde no se eligen desde hace más de cuatro años, y contra el cierre de la planta de Bagley en Constitución.
Desde EL MILITANTE impulsamos la conformación de estas listas antiburocráticas, venciendo las tendencias antisindicales, sectarias, hegemonistas y de sindicalismo rojo que impiden la recuperación de las organizaciones obreras.
Además insistimos en la necesidad de coordinar todas estas experiencias que vienen realizándose en distintos sindicatos (docentes, subte, mineros, astilleros, ferroviarios, etc.) en una corriente unificada. Si estas listas aparecieran bajo un mismo nombre, en varios sindicatos de la CGT y de la CTA, en muchas provincias, se convertirían en referente nacional para todos los trabajadores incluso los más aislados política y geográficamente.