El desempleo ha llegado hasta el 10% en Europa. La clase trabajadora europea está sufriendo cada vez más golpes por las consecuencias de la crisis financiera. En España, hay cerca de 4,5 millones de desempleados. En Grecia, la clase dominante llevó la deuda pública a los 294.000 millones de euros, y ahora quieren que sean los trabajadores quienes paguen sus costos.
La crisis financiera
El desempleo ha llegado hasta el 10% en Europa. La clase trabajadora europea está sufriendo cada vez más golpes por las consecuencias de la crisis financiera. En España, hay cerca de 4,5 millones de desempleados. En Grecia, la clase dominante llevó la deuda pública a los 294.000 millones de euros, y ahora quieren que sean los trabajadores quienes paguen sus costos.
Para la clase dominante, la única solución para la crisis es una mayor explotación de la clase trabajadora, sacando todos los derechos que conquistaron en décadas. Como consta en la edición del diario británico The Economist "guste o no, estamos volviendo al mundo pre-Bismark donde el trabajo formal no tenía punto final" (The Economist, 29/06/09). Es decir, hay que trabajar hasta caer muerto. Esta la idea dominante en la burguesía.
Pero, la clase trabajadora no va a permitir ninguna reducción a su nivel de vida o el saqueo de sus derechos. Esto va generar un gran conflicto entre la clase trabajadora y la burguesía.
La resistencia de la clase trabajadora
La disposición y el deseo de la clase obrera europea para la lucha contra los capitalistas y cambiar su situación puede ser vista en las movilizaciones contra el gobierno de derecha de Sarkozy, en Francia, cuando 2,5 millones de personas salieron a las calles el 29 de enero y el 19 de marzo de 2009.
La mayor manifestación estudiantil de la historia de Austria fue en el mes de abril del 2009, en la que 60 mil secundarios protestaban contra la supresión de cinco días de vacaciones y pidieron un incremento en el gasto del sistema de educación pública.
También podemos ver la voluntad de cambio en los resultados de las últimas elecciones de algunos países de Europa, como en Alemania y Portugal.
En Alemania, la crisis ha provocado una fuerte caída de las exportaciones, de la que su economía tiene una gran dependencia. Las elecciones de septiembre del 2009 revelaron un importante giro hacia la izquierda. Mientras que el SPD (Socialdemócrata) cayó desde un 30,4% hasta un 17,9%, la derecha ganó. El partido de Izquierda Die Linke hizo una votación muy importante, del 11,9%, con un aumento de 3,2% con respecto a las elecciones anteriores.
Portugal, ya estaba en crisis antes que estallara la recesión económica mundial. Pero ahora con la crisis ha quedado más enfermo, con su frágil economía. El Partido Socialista perdió la mayoría absoluta. El índice de abstención creció del 35% al 40%. La derecha del Partido Social Demócrata y el Partido Popular tuvieron un incremento en su votación. Pero, los partidos de izquierda también crecieron. El Bloque de Izquierda duplicó su votación y obtuvo 16 diputados, y el Partido Comunista consiguió 15 diputados.
La crisis griega
Grecia, tiene hoy la peor situación de la Unión Europea (EU). La unificación monetaria solo ha conseguido exacerbar los problemas de los capitalistas europeos porque los países no pueden devaluar unilateralmente la moneda. El capitalismo griego es, junto al italiano, portugués e irlandés, el eslabón más débil de la Unión Europea.
En las últimas elecciones, ganó el partido socialista, PASOK. Es la primer gran victoria tras años de gobierno de la derecha con la Nueva Democracia. Los trabajadores votaron al partido socialista con la esperanza de que éste los ayudara, que no recortara sus derechos y los obligara a pagar por la deuda.
Pero el PASOK ha hecho todo lo contrario, y aprobó un durísimo plan de ajuste. Es bastante probable, incluso, que Grecia reciba un rescate multimillonario de la UE y del FMI de más de 40.000 millones de dólares para evitar que su deuda pública entre en cesación de pagos (default). Las medidas austeras tomadas por el gobierno van a tener un gran impacto en la conciencia de los trabajadores. Habrá una gran radicalización en la lucha de los trabajadores griegos.
Nuestras perspectivas
Toda esa situación demuestra que hay un cambio en la lucha de los trabajadores. Cuanto más lejos va la voluntad de la burguesía en explotar a los trabajadores, más fuerte la necesidad de la clase obrera de buscar una salida. Es momento para explicarle a todos los trabajadores, organizados en sus partidos y sindicatos, que sólo con la socialización de los medios de producción (fábricas, tierras y Bancos) y la toma de poder por parte de la clase obrera, podremos construir una sociedad donde no exista el desempleo, la miseria y la explotación, una sociedad socialista.
