¿Una nueva oportunidad para A y L?
Un caso aparte es el de Zamora y Audeterminacion y libertad. A pesar de la buena expectativa expresada en el caudal de votos de su última presencia electoral, al calor de un reconocido discurso antimperialista y anticapitalista, creemos que Zamora ha desperdiciado dicha expectativa, desperdiciando también las diputaciones nacionales y de la Legislatura porteña logradas. No porque expresemos confianza en ese nido de víboras, pero sí porque esos cargos puestos al servicio de la lucha de los trabajadores, y buscando la Unidad de Acción con el resto de la izquierda, hubieran sido de gran utilidad a dichas luchas, y porque además la presencia de Zamora todavía despierta algunas expectativas entre capas de trabajadores que se interesan de manera muy especial en sus intervenciones cuando él mismo se decide a hacerlo.
Desgraciadamente esto es lo que menos ha hecho Zamora en los últimos meses, paralizando incluso a sus militantes: su propio minibloque parlamentario se disgregó, su agrupación AyL, y él mismo, desaparecieron de la escena política y de la lucha de clases en general.
Llamamos a Zamora a reconsiderar el papel que él mismo y su agrupación pueden jugar, rompiendo con propios vicios que tanto critica a los partidos de izquierda, y no dejándose llevar por prejuicios sectarios.
