La organización, las asambleas y el debate de los vecinos del barrio durante estos dos últimos meses, logró colocar en los medios de comunicación este nuevo atropello a las condiciones de vida. A pesar que desde el municipio y la provincia rechazaran como veraz la intoxicación con plomo, la lucha de los vecinos logró que el Ejecutivo nos convocara a una reunión con autoridades sanitarias y medio ambientales de la provincia.
La lucha por el medio ambiente y la salud cada vez se muestra más acuciante, y expresa la necesidad de un plan estratégico en las ciudades del ex Cordón Industrial de la zona norte de Rosario.
A las denuncias de los vecinos de San Lorenzo y Puerto San Martín sobre el ingreso de miles de camiones al ejido urbano con la consecuente contaminación, sumado a las altas dosis de glifosato que trasladan los camiones -silos, cada vez más asociadas a los altos índices de cáncer en estas ciudades, hay que sumar las petroquímicas y celulosas en Capitán Bermúdez para dar una idea de la contaminación a la que nos vemos sometidos diariamente los vecinos de esta zona.
Pero parece que no todo termina allí. Si los vecinos de Granadero Baigorria, en algún momento pudimos jactarnos de la lucha contra la instalación de puertos secos, contra los depósitos de agrotóxicos, contra la instalación del horno pirolítico en el Hospital Provincial Eva Perón, etc., hoy tenemos un nuevo desafío: vecinos del Barrio Santa Rita/Litoral -uno de los más populosos de la ciudad- están intoxicados con plomo.
¿Cuáles son las vías para contaminarse con plomo? Los alimentos, el aire, el agua y el suelo/polvo.
¿Quiénes son más vulnerables? Los niños son especialmente vulnerables debido a que absorben mayor cantidad de plomo, están en etapa de desarrollo neurológico, tienen menor capacidad de almacenamiento y están en mayor contacto con el suelo y el polvo.
Efectos Toxicos: disminucion del desarrollo intelectual con mayor incidencia de trastornos del comportamiento y del aprendizaje en el niño; pueden aparecer trastornos bioquímicos (sin síntomas) y alteraciones neurocomportamentales.
Pero incluso, el tratamiento con antídotos quelantes (un tipo de antídoto especialmente indicado para el plomo), puede movilizar en forma masiva el plomo de los sitios de reserva hacia el sistema nervioso, y ocasionar mayor daño. Tiene, además, efectos colaterales, por eso cada decisión terapéutica debe ser estrictamente evaluada.
Para controlar la contaminación es necesario conocer cuál es su origen, identificar la o las fuentes y actuar sobre ellas.
La organización, las asambleas y el debate de los vecinos del barrio durante estos dos últimos meses, logró colocar en los medios de comunicación este nuevo atropello a las condiciones de vida. A pesar que desde el municipio y la provincia rechazaran como veraz la intoxicación con plomo, la lucha de los vecinos logró que este lunes el Ejecutivo nos convocara a una reunión con autoridades sanitarias y medio ambientales de la provincia.
El reclamo de los vecinos es uno e inequívoco: plan estratégico para la ciudad, erradicación de las fábricas (sin perjuicio de sus trabajadores) de los barrios residenciales y saneamiento ambiental en la zona afectada. En este marco, logramos arrancar a la provincia una reunión entre las partes (vecinos y Estado) que incluye a médicos, bioquímicos, epidemiólogos, toxicólogos, involucrados por parte de los vecinos, a fin de poner en consonancia los parámetros para determinar el grado de contaminación y ampliar el muestreo del barrio. También la secretaría de Medio Ambiente de la Provincia, se comprometió a contratar investigadores del CONICET para hacer un estudio de suelo y agua lindante a las casas de los vecinos contaminados.