“Mantenemos la pelea por la estatización de la fábrica bajo control obrero”

0
132

Los obreros de Zanón llevan 3 años de una lucha ejemplar por la estatización de la fábrica bajo control obrero, que ocuparon y pusieron a producir tras la decisión de los antiguos dueños de cerrarla. Ahora organizaron un acampe de 8 días frente al Congreso de la nación para exigir una Ley Nacional de expropiación de fábricas recuperadas, el reconocimiento de la cooperativa Fasinpat para que transitoriamente asuma la gestión y administración de la fábrica, además de organizar charlas, actividades, res, recitales de música y una exposición de productos cerámicos que los trabajadores están elaborando con gran sacrificio. Entrevistamos al compañero Raul Godoy, dirigente de los obrros de Zanón y del sindicato ceramista de Neuquén.

Entrevista a Raul Godoy, dirigente de Zanón y del sindicato ceramista de Neuquén

Los obreros de Zanón llevan 3 años de una lucha ejemplar exigiendo la estatización de la fábrica bajo el control de los trabajadores, que ocuparon y pusieron a producir tras la decisión de los antiguos dueños de cerrarla. En este tiempo, multiplicaron la producción de productos cerámicos, los trabajadores ocupados pasaron de 280 a 450 y reciben un salario igual para todos y superior al fijado por el convenio.

Los obreros de Zanón junto al sindicato ceramista de Neuquén decidieron organizar un acampe de 8 días frente al Congreso de la nación (desde el 19 al 27 de noviembre) con el objetivo de exigir una Ley Nacional de expropiación de fábricas recuperadas bajo el control de los trabajadores, el reconocimiento de la cooperativa Fasinpat (fábrica sin patrones), formada por los propios obreros de Zanón, para que transitoriamente asuma la gestión y administración de la fábrica hasta que se haga efectiva la estatización de la misma bajo control obrero, y para fortalecer la solidaridad de la lucha de Zanón a nivel nacional organizando charlas, actividades, recitales de música y una exposición de productos cerámicos que los trabajadores están elaborando con gran sacrificio. Por eso entrevistamos al compañero Raul Godoy, dirigente de los obreros de Zanón y del sindicato ceramista de Neuquén, para que nos explique todo esto más en detalle.

El Militante.-¿Después de tres años de mantener ocupada la fábrica y de haberla puesto a producir qué balance hacen ustedes de la lucha que han estado dando?

Raul Godoy.- Mirá, que la solución definitiva a los problemas la tienen los trabajadores. Que con organización y con lucha los trabajadores de forma independiente podemos llevar esto adelante hasta el final. Este es el primer balance que puedo hacer. Después, que la pelea es dura, es grande, que no depende sólo de los obreros de Zanón sino que depende del conjunto de los trabajadores y, bueno, también del pueblo que ha venido apoyando, y que gracias a eso está Zanón de pie. Por la decisión firme de los compañeros, de los obreros de Zanón, pero con el apoyo enorme de los distintos movimientos de desocupados, de los compañeros de lucha, del conjunto de la comunidad.

Hoy iniciamos una etapa distinta que es nacionalizar nuestro conflicto de una manera mucho más fuerte. Hemos participado en muchas movilizaciones y movidas acá nacionalmente, pero ahora nos parece que tenemos que ir a fondo porque allá, con el Gobierno de Neuquén, ya tenemos clara cuál es la solución que proponen, que es la represión y el desalojo. Por eso ahora estamos exigiendo también a la Cámara de Diputados y al gobierno nacional una respuesta concreta, estamos planteando el tema de la expropiación definitiva de esta fábrica por ley y también tomando el reclamo de compañeros de otras fábricas la expropiación definitiva de todas estas fábricas tomadas por sus trabajadores y su puesta en funcionamiento al servicio de la comunidad. Ese es nuestro proyecto, esa es la propuesta que estamos haciendo hoy y, bueno, es la pelea que abrimos hoy acá en Buenos Aires de forma más fuerte.

EM.-¿Qué objetivo buscan con este acampe frente al Congreso?

RG.- Tiene el objetivo de nacionalizar nuestro conflicto sí, y de difundir e instalar el tema también nacionalmente. Porque cada día que pasa sin soluciones en Neuquén es una amenaza concreta que tenemos, y bueno también tiene responsabilidades nacionales. Como han dicho muchos jueces esto se arregla con una solución política. Por eso reclamamos también al gobierno esta solución.

EM.- Ustedes siempre exigieron la estatización de la fábrica bajo control obrero y ahora plantean transitoriamente que la misma sea gestionada por los obreros bajo la forma de una cooperativa ¿A qué se debe este cambio en el reclamo?

RG.-Porque nuestra pelea de fondo, como te decía, sigue siendo la misma, sigue siendo el tema de la estatización con control obrero; es decir, con administración obrera directa. Porque es la única garantía de que una fábrica en manos del estado funcione bien, con la administración de los trabajadores sin ningún funcionario dentro de esa fábrica. Que controlen cuánto se produce, a dónde va el dinero, que informen a la comunidad, que sea para un plan de obras públicas, etc. Y esto por qué: porque no pensamos que la solución sea individual de competir en el mercado capitalista, compitiendo para ver cómo jodemos al otro que está produciendo al lado nuestra, sino que tiene que ver con un fin más social. Esa es el espíritu de lo que planteamos. El hecho de haber planteado la formación de una cooperativa ahora, Fa.Sin.Pat (Fábrica sin patrones), es para que nos otorguen la administración temporariamente hasta la finalización del conflicto. Porque lo que todo el mundo dice es que hasta que no se termine este proceso de concurso nadie puede hacer nada. Lo cual opinamos que no es así. Pero de cualquier manera ponemos la cooperativa para que nos otorguen la administración como una forma de salvaguarda legal, y a partir de ahí poder seguir peleando para nuestro proyecto de fondo que es la estatización bajo control obrero.

EM.- Por último, estamos viendo una reactivación del movimiento obrero con la generalización de las luchas por aumento de salarios y otras reivindicaciones, con el Movimiento por las 6 horas de trabajo, vuestro propio ejemplo que se convirtió en uno de los emblemas del movimiento obrero y popular después del Argentinazo, y otras ¿Cuáles son las tareas, a tu juicio, más apremiantes que tiene ante sí el movimiento obrero argentino?

RG.- Precisamente, este es uno de los temas que vamos a tocar en la carpa el sábado a la tarde. Invitamos a los compañeros del Cuerpo de Delegados del Subterráneo, al cuerpo de delegados ferroviarios de Haedo, al Cuerpo de Delegados del Astillero Río Santiago, a compañeros de fábricas recuperadas, a otros compañeros delegados y de Comisiones internas. Pero la primera cuestión nos parece que es la coordinación. Nosotros estamos planteando la necesidad de una Mesa de Coordinación obrera en la que estemos todas las organizaciones recuperadas de la burocracia sindical, que empecemos a coordinar acciones. Nuestra propuesta es ésta. Y que nos manejemos con mandato de asambleas, que ellas lo firmen. No se trata de juntarnos 5, 6 ó 10 dirigentes en una sala, sino que se trata de que nos juntemos desde las bases, que todos los compañeros entremos en este proceso de coordinarnos. Creo que esto lo tenemos en la mano, que tenemos la posibilidad concreta de hacerlo. Por eso hemos participado en la campaña por las 6 horas junto a los compañeros del Subte, que nos parece una muy buena consigna y hay que hacer esa campaña. Pero también decimos que hay que apoyar las luchas que hay por aumento salarial. Tenemos que ir a los compañeros que están peleando hoy, como los compañeros ferroviarios. Tenemos que pelear contra los despidos. Ahora hay 3 compañeros despedidos en ferroviarios que encabezaron la Lista Bordó. Tenemos la lucha por la libertad de los presos políticos, que nos parece elemental. Es decir, tenemos que empezar con las cuestiones que ya las tenemos en la mano, que son parte de nuestros reclamos en común y lo podemos empezar a hacer ya, mañana. Entonces esta es la propuesta que manejamos.

Y entonces al servicio de eso también está nuestro periódico militante que es Nuestra Lucha que lo hacemos los compañeros de Zanón, pero junto con compañeros de otras comisiones internas, como la de la alimentación y de otros sectores. Lo ponemos a disposición para que cada uno aporte desde su lugar, manteniendo su autonomía, su independencia, su propio criterio, pero sí un lugar que podamos difundir todos nuestro punto de vista, y abrir los debates ahí, pero que mientras tanto todos los trabajadores sean parte de ese colectivo de pensamiento. Digamos, que aporten en las discusiones y por eso para nosotros este periódico es muy importante para llevar esta palabra. Nosotros lo abrimos sin ningún tipo de condicionamiento, como a los compañeros de Río Turbio, se lo abrimos a los compañeros del Subte para que puedan hacer su campaña. Ahora a los compañeros ferroviarios también. O a los compañeros de Altos Hornos Zapla en Jujuy que dieron hace poco una pelea enorme y bueno, así a todos los compañeros que están en lucha este periódico está abierto, es su herramienta y esperamos construirlo en común y que ahí podemos ir debatiendo también.

Estas son las cosas que, modestamente y en la medida de nuestras fuerzas, podemos aportar, nuestro granito de arena, y esperamos hacerlo crecer.