Como venimos denunciando desde estas páginas la ruta sojera no es un problema solamente de índole ecológico, sino fundamentalmente político. Como venimos denunciando desde estas páginas la ruta sojera no es un problema solamente de índole ecológico, sino fundamentalmente político.
Los representantes políticos de las grandes empresas mantienen una clara conducta de connivencia con las mismas. Acá no hay distinción ya que en los diferentes niveles institucionales, sea municipal, provincial o nacional en sus distintas responsabilidades, ejecutivo o legislativo, tienen la misma actitud de gerentes de las multinacionales.
Desde Granadero Baigorria, junto a otras localidades y organizaciones, venimos poniendo freno a las embestidas de los pregoneros de la muerte.
La división de las ciudades del Cordón Industrial, -se calculan entre 7 u 8 horas de paso de convoyes de hasta 120 vagones-, aprovechando la vieja traza ferroviaria, es uno de los tantos problemas de las poblaciones del litoral.
Pesticidas, DDT, grandes complejos cerealeros, moliendas, silos, astilleros de barcazas, pasteras, han cambiado la fisonomía de un Cordón que expresaba cierto desarrollo industrial. Lejos se encuentra aquella realidad que ya el menemismo se encargó de aniquilar en los "90.
Las acciones que se han desarrollado, y que planificamos a futuro, hablan a las claras de la voluntad de oponernos a esta otra cara de la explotación y de la opresión, en definitiva de la barbarie capitalista: la contaminación en el sentido más amplio. Los pausados, pero firmes pasos adelante dados por la conciencia de la población, no visualizan solamente un problema de contaminación, sino también un modelo económico agro-exportador como causante de las condiciones de trabajo y de salud impuestas por el imperialismo y la burguesía nacional.
Por ello estamos avanzando en la construcción de la Coordinadora de Asambleas por la Vida del Cordón Industrial.
El 16 de septiembre a las 17hs., en Puerto Gral. San Martín, convocamos a trabajadores, vecinos y jóvenes a sumarse a la defensa incondicional de la vida, que supone una lucha abierta por:
*Salario básico equivalente al costo de la canasta familiar, hoy $2200.-
*Educación Pública , Gratuita y Laica.
*Defensa del Hospital Público y Gratuito. Por un Plan Único Nacional de Salud. No al Hospital Público de Autogestión.
*Plan Nacional de Viviendas bajo control de los trabajadores y adjudicatarios.
*No a la desocupación. Por un Plan Nacional de Obras Públicas bajo control de los trabajadores.
*Control obrero y popular de las empresas y comunidades afectadas por la contaminación empresaria. Recursos naturales en manos del Estado.
*No a la deforestación de nuestros Bosques.