Suba de precios: así nos roban a los trabajadores

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La suba de precios está en el centro del debate social. Según las cifras oficiales, los precios aumentaron en promedio un 5% entre enero y abril. Pero cualquier ama de casa, joven o trabajador sabe que esto es mentira. Los precios de la comida, de la vestimenta y otros productos aumentaron en promedio un 15%, un 20% ó un 30% en todo este tiempo y nuestros salarios no alcanzan para vivir dignamente. La suba de precios es una estafa a los trabajadores, lo que nos dan de aumento salarial luego lo recuperan los capitalistas subiendo los precios. Ellos no sacrifican un centavo y nosotros no ganamos nada.
Después de la devaluación justificaron los aumentos de precios porque subía el dólar y había que importar de afuera. Curiosamente, la mayoría de los productos que están subiendo (alimentos, vestido, etc) están fabricados mayormente con insumos nacionales ¿Dónde está la trampa? La carne, la harina, la leche o la miel suben porque los capitalistas y terratenientes prefieren exportar la mayor parte de su producción al extranjero donde se los pagan a precios altos, a pesar de que acá son producidos a bajo costo. Como estas mercaderías son "su" propiedad, nos chantajean diciéndonos: "si quieren comer y vestirse páguennos como en el extranjero".
También le echan la culpa del aumento de los precios a la suba de los salarios. O yo no entiendo nada, o estamos todos locos. Las estadísticas dicen que en 1999 se producía lo mismo que ahora pero que trabajaba un 15% más de gente y se ganaba un 29% más ¿Cómo pueden ser las subas salariales las responsables del aumento de los precios si ganamos un 29% menos en promedio, trabaja menos gente produciendo lo mismo, y hay más desocupación y pobreza?
Es sabido que muchas mercaderías de Estados Unidos, Europa o Japón son más baratas que las nuestras mientras que los salarios de los trabajadores norteamericanos, europeos y japoneses son muchísimo mayores ¿Qué misterio hay aquí? La explicación está en que la inversión en nuevas máquinas y tecnología abarata el costo de producción, siendo el salario sólo una parte pequeña del costo total. Sin embargo la antigüedad promedio de las máquinas de nuestras fábricas es de 15 ó 20 años, cuando estos países las renuevan cada 5 años. El problema es que la mayoría de los empresarios acá no invierten o lo hacen muy poco. ¿Acaso no tienen plata? Nada de eso. Los capitalistas argentinos tienen depositados 110.000 millones de dólares en cuentas corrientes sólo en el extranjero, según cifras oficiales, cuyos intereses les rinden enormes ganancias ¿Cómo puede ser que toda esa plata esté afuera cuando debería estar acá abriendo fábricas y hospitales, construyendo rutas y viviendas, pagando salarios decentes a los trabajadores y renovando la tecnología? Porque es "su" propiedad.
Todo esto pone al desnudo el carácter parasitario y rapaz de los burgueses. Prefieren dejar a la gente desnutrida, mal alimentada, desocupada o sin un centavo en el bolsillo con tal de acumular enormes ganancias a costa del pueblo trabajador que es el que produce las mercaderías que ellos venden. Si todas estas tierras, fábricas y bancos estuvieran en manos de los trabajadores resolveríamos nuestros problemas porque produciríamos y planificaríamos los recursos para satisfacer las necesidades populares, y así impediríamos que continuara este expolio a las familias trabajadoras.