La lucha de los estudiantes secundarios de Capital es una inspiración para todos los que sufrimos las consecuencias de este sistema injusto y explotador que se llama Capitalismo, gestionado por los grandes empresarios y sus políticos a sueldo, como Mauricio Macri.
La lucha de los estudiantes secundarios de Capital es una inspiración para todos los que sufrimos las consecuencias de este sistema injusto y explotador que se llama Capitalismo, gestionado por los grandes empresarios y sus políticos a sueldo, como Mauricio Macri.
La toma de escuelas tuvo el efecto positivo de instalar el debate en la sociedad y generar cierta simpatía en la población. Pero esta batalla no está ganada. En general, los medios apoyan a Macri o comienzan a tomar distancia de la lucha estudiantil.
Debemos añadir que las tomas tienen también sus límites, porque no involucran a la mayoría de los estudiantes. Para incorporar a más compañeros a las movilizaciones y aumentar la simpatía de nuestra lucha entre la población, hay que salir a la calle.
Marchas como las del Lunes 6 de septiembre, y otras, son el camino; o visitar escuelas que aún no se sumaron a la lucha. Otra manera sería salir a volantear nuestros barrios, los mercados, las paradas de colectivos, las estaciones de subte, etc.
También se podría ir a los sindicatos docentes y centrales sindicales, como la CTA, a pedir apoyo activo a nuestra lucha, que impriman volantes a los centros de estudiantes y organicen asambleas y reuniones de trabajadores para que inviten a los estudiantes a explicar su lucha y pedir solidaridad.
Por último, nos parece que sería necesario organizar reuniones amplias en cada escuela con docentes y padres, para explicarles los motivos de la lucha y pedirle su solidaridad; pero, sobre todo, para preparar úna gran marcha por la tarde en Capital de estudiantes, padres y trabajadores docentes y no docentes, en defensa de la escuela pública, que sea masiva y que muestre Macri y su camarilla que los trabajadores y sus hijos no estamos dispuestos a contemplar así nomás el desmantelamiento de la educación pública en nuestra ciudad.