9 meses después, el conflicto en la Escuela de Enfermería se ha agudizado aún más
Un conflicto que comenzó hace apenas nueve meses, donde la patronal pretendía tan sólo despedir con causa a trabajadores dependientes de la Cooperadora de la FCM, para no pagar un peso, una patronal que pretendía desarmar una modalidad educativa para luego ver cómo podía rearmarla en función de sus intereses; tiene hoy un conflicto que se ha extendido a los trabajadores en los hospitales públicos y sanatorios, y que ha consolidado la idea de que la unidad de trabajadores, docentes y administrativos es la mejor estrategia para defender los intereses de las mayorías.
9 meses después, el conflicto en la Escuela de Enfermería se ha agudizado aún más
Si hacemos un balance de los resultados de aquel petitorio inicial, tendríamos que decir que son escasas, si no insignificantes.
Lo que la patronal universitaria tanto de la Facultad de Medicina como de la Universidad se vanaglorian de haber logrado, es lo mínimo indispensable que fuera reclamado en el 2008 para iniciar las actividades del ciclo lectivo 2009 para el 1er año de la Carrera.
Del petitorio que se elevó este año, recién a fines de noviembre se aprueba por Consejo Superior los reclamos docentes pero, por supuesto, no hay fecha de implementación. Mientras tanto, a pesar del déficit docente y las dificultades para garantizar el funcionamiento del resto de la Carrera y de las sub sedes, se han dictado clases.
Pero lo que queda claro es la intención descarada de la patronal de dividir a docentes de administrativos, y desarticular el conflicto.
Las maniobras intimidatorias, el abuso de la jerarquía, la persecución, el clima irrespirable de trabajo es lo que ha imperado.
Pero a pesar de todo esto, se ha continuado con las asambleas respetándolas como el espacio para tomar decisiones que defiendan los derechos de todos: trabajadores y estudiantes.
Un párrafo sólo para aclarar a quienes nos referimos cuando hablamos de patronal. Hablamos de un Rectorado en manos del radicalismo y un Vicerrector del Frente para la Victoria, hablamos de un Rectorado que asumió mientras eran reprimidos los estudiantes que se oponían a la maniobra, un Rectorado que contrató para ello a los barrabravas de Newells. Un rector que, a su vez, es presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) por segunda vez, y que en Rosario acepta con los brazos abiertos los fondos espurios de la minera La Alumbrera. Un rector que judicializa las luchas estudiantiles y persigue a docentes. Pero también tenemos lo nuestro en la Facultad de Ciencias Médicas (FCM), un Decano que dice ser de la oposición pero que llega tarde a la votación "express" del presupuesto, y con esto le garantiza al Rectorado que maneje los fondos a piacere. Un decano que tiene poco de rasgos democráticos, que genera cargos para sus amigos y donde la palabra diálogo no entra en su vocabulario. Un Decano que dice defender la universidad pública, gratuita y laica, haciendo convenios con la Fundación Villavicencio y aceptando fondos de PAMI Central. Un convenio hecho a medida: por cada alumno que recibe una beca y es retenido en el sistema (a cualquier costo) la FCM recibe $200 mensual. El número pretendido eran 500 becas y la friolera de $100.000 mensual, pero la respuesta de los estudiantes no fue la esperada. Un decano que "defiende" el ingreso irrestricto y la educación gratuita pero que implementa un Módulo de Inclusión Universitaria que sale la pequeñez de $90 y que es obligatorio cursar y aprobar.
Así llegamos a octubre, donde montando una escena dantesca, inspirada en los peores años del menemismo, el Secretario General de la FCM, el abogado, la escribana, la Sec. Administrativa, el Jefe Administrativo de la Escuela, la Vicedirectora de la Escuela a cargo de la Dirección y 8 no docentes por orden del Decano vacían la oficina de cómputos de la Escuela aduciendo graves irregularidades.
No satisfechos con eso, denuncian en el diario de la ciudad estas graves irregularidades perpetradas supuestamente por ciertos docentes y los administrativos, sembrando sobre todos un manto de sospechas.
Como repuesta, la asamblea de autoconvocados decide organizar un campaña de repudio a estas infamias y comenzar a articular esta lucha con trabajadores Enfermeros y Licenciados en los servicios.
Como corolario, tenemos a la fecha la renuncia de la Vicedecana de la FCM, que es Licenciada en Enfermería, denunciando estos atropellos y las formas poco democráticas que viene asumiendo la gestión de la FCM.
Hay que destacar que la asamblea de autoconvocados, entendiendo que este conflicto afecta tanto a los trabajadores en la universidad (docentes y administrativos), a la educación pública gratuita y laica, y a los trabajadores Enfermeros y Licenciados en los servicios, convocan a una asamblea el próximo 16/12 para repudiar las injurias por parte de la gestión de la FCM, para debatir cómo defender la Escuela y jerarquizar el rol del profesional de Enfermería en el equipo de salud y en la sociedad.
Un conflicto que comenzó hace apenas nueve meses, donde la patronal pretendía tan sólo despedir con causa a trabajadores dependientes de la Cooperadora de la FCM, para no pagar un peso, una patronal que pretendía desarmar una modalidad educativa para luego ver cómo podía rearmarla en función de sus intereses; tiene hoy un conflicto que se ha extendido a los trabajadores en los hospitales públicos y sanatorios, y que ha consolidado la idea de que la unidad de trabajadores, docentes y administrativos es la mejor estrategia para defender los intereses de las mayorías.
Corresponsal