La deuda eterna

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Gobierno y oposición acuerdan reabrir el canje de la deuda y pagar al Club de París

La reapertura del canje de la deuda con los acreedores que no ingresaron al canje del 2005, y que asciende a 29.000 millones de dólares, sumado al acercamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI), prepara las condiciones para pagar también la deuda con el Club de Paris que asciende a $US 6.706 millones. Se dice que todo esto daría credibilidad al país y permitiría acceder al financiamiento internacional, pero manteniendo al país encerrado en el círculo vicioso del endeudamiento ya que cuanto más pagamos, más debemos.

Gobierno y oposición acuerdan reabrir el canje de la deuda y pagar al Club de París

Ante el deterioro de la caja estatal el gobierno Kirchnerista intenta desesperadamente aparecer como un "buen chico" ante los ojos de los organismos de crédito internacional. Es por eso que el mes pasado el Congreso aprobó un proyecto de ley, enviado desde el Ejecutivo, que propone la suspensión de la denominada "Ley Cerrojo", que fue sancionada en el 2005 para dejar afuera del pago de la deuda externa a los bonistas, bancos y fondos buitres que no aceptaron ingresar al canje de deuda de ese año que implicaba una quita nominal del 68%. Ahora dan marcha atrás y proponen aplicar una quita del 48% a los 29.000 millones de dólares de la deuda externa dejada afuera en el 2005.

Esta reapertura del canje, sumado al acercamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI), prepara las condiciones para pagar también la deuda con el Club de Paris que asciende a $US 6.706 millones. Se dice que todo esto daría credibilidad al país y permitiría acceder al financiamiento internacional, pero manteniendo al país encerrado en el círculo vicioso del endeudamiento ya que cuanto más pagamos, más debemos.

Según el Ministro de Economía, Amado Boudou, durante este mes se darían los primeros pasos en este sentido.

Gobierno y oposición generosos con los ricos

La suspensión de la Ley Cerrojo, que habilita el pago de cifras siderales a grandes bancos como el Barclays, Citibank y Deutsche Bank, no se podría haber llevado a cabo sin los votos que complacientemente prestaron al Kirchnerismo los legisladores del radicalismo, el macrismo y la Coalición Cívica de Carrió, poniendo en evidencia que a pesar que se pelean durante todo el año son capaces de ponerse armoniosamente de acuerdo cuando se trata de beneficiar a los grandes bancos o a los países imperialistas que conforman el Club de Paris (EE.UU, España, Alemania, Francia, Japón y Suiza, entre otros).

Cabe destacar que el diputado Claudio Lozano de Proyecto Sur votó en contra de la suspensión de la ley.

Mientras los trabajadores sufrimos el aumento de la inflación que devora nuestros salarios, la desocupación continúa en aumento, la pobreza azota nuestro país, se reduce el presupuesto para salud en 2010, y nos piden que nos conformemos con una asignación de  $180 mensuales por hijo, la clase política se prepara para hacer una oferta excesivamente generosa a los especuladores que compraron esos bonos de la deuda. Estos fondos buitres compraron sus bonos de deuda a pequeños ahorristas desesperados por 20 ó 30 dólares, cuando valían nominalmente 100 dólares, y ahora al aplicársele la quita del 48%, recibirán del Estado argentino bonos nuevos por valor de 52 dólares, de manera que obtendrían con la transacción una utilidad de más del 100%. Por lo tanto, obtendrían una ganancia cercana a 2.000 millones de dólares con el canje.

Pero eso no es todo ya que también se les reconocería los pagos de los intereses acumulados  por el cupón PBI (un bono que premia a los acreedores y que incluye pagos extras si la riqueza generada por el país tiene un crecimiento apenas moderado) (un bono que premia a los acreedores con pagos extras si el PBI, el valor de la producción generado por el país, tiene un crecimiento mayor al 5%, como fue el caso de 2003 a 2008), lo cual añadirá 1.500 millones de dólares más a los pagos por la deuda externa.

¡Cuantas reformas se podrían hacer a favor de los trabajadores y el pueblo pobre con toda esta plata! Habría dinero de sobra para equipar dignamente  nuestros hospitales y escuelas, mejorar nuestros barrios, avanzar en la solución del problema de la vivienda, acrecentar salarios, sacar de las calles a los pibes que se mueren de hambre, etc.

Una deuda ilegitima e inmoral

Con esta medida, tanto el gobierno como los empresarios probablemente tengan acceso a suculentos créditos internacionales mientras los trabajadores seguimos pagando los platos rotos de la crisis económica del capitalismo con desocupación y ajuste.

Es indignante que mientras los trabajadores padecemos una crisis que no generamos el gobierno tome este tipo de medidas, que son típicas de las administraciones más cercanas al neoliberalismo, aceptando pagar una deuda ilegitima e ilegal que fue contraída por gobiernos totalmente antipopulares e inflada con la deuda privada de los grandes bancos como Bank of Boston, el Chase Manhattan, el Bank of America, el Deustsche Bank, City Bank, Banco Galicia, Banco Rio, etc. o multinacionales como Esso, Fiat, Mercedez-Benz, Ford, IBM, y empresarios locales como Pérez Companc, Fortabat, Techint y el Grupo Macri, entre otros. De esta manera transfirieron sus propias estafas y quebrantos al Estado.

Por un gobierno de los trabajadores

Está claro que gobierno, oposición, la prensa patronal y las cámaras empresarias como la UIA, AEA y la Sociedad Rural están de acuerdo en algo, seguir desangrando las arcas del Estado en beneficio de los grandes capitalistas

Ninguno de ellos representan una alternativa para los únicos que generamos la riqueza del país: Los trabajadores.

Mientras el gobierno, por un lado, adopta algunas medidas progresistas para recuperar el apoyo social perdido; por el otro, cumple con los capitalistas, y la oposición a su derecha se muestra aún más servil a los intereses de los ricachones. Por lo tanto, es nuestra tarea indispensable avanzar en la creación de una herramienta política que realmente represente los intereses de los trabajadores y los oprimidos luchando por construir una soberanía financiera al servicio del pueblo, y que de una vez por todas arroje a los que lucran con el hambre del pueblo al basurero de la historia.