México: miles en las calles contra la imposición. Es necesario profundizar la lucha

Nuevamente miles de personas marcharon el día Sábado 22 de Julio en contra de la imposición en la presidencia de Enrique Peña Nieto, cerca de 50 mil personas en la Ciudad de México y miles más en 30 ciudades, convocados por la Convención Nacional contra la Imposición, realizada en San Salvador Atenco, Estado de México.

Miles de los jóvenes que asistieron a la movilización se asumen como parte del movimiento #YoSoy132, el cual nació a partir de la visita de la Universidad Iberoamericana del entonces candidato del PRI a la presidencia Enrique Peña Nieto. A partir de entonces miles de jóvenes han tomado como bandera el movimiento a nivel nacional para manifestar su oposición a la candidatura antes, y ahora a la imposición del candidato del PRI. También estaban presentes integrantes del Movimiento Regeneración Nacional, los estudiantes no aceptados en el IPN y UNAM, el Sindicato Mexicano de Electricistas, maestros de la CNTE, los compañeros de Atenco y diversas organizaciones sociales, todos unidos bajo una sola idea: ¡No a la imposición!, ¡No a un nuevo gobierno del PRI!.

La manifestación partió de Los Pinos, muy puntual a las 12 del día, pero a los largo del Paseo de la Reforma había miles de personas apoyando y esperando sumarse a la movilización. En el Ángel de la Independencia miles se concentraban, también, para sumarse con sus contingentes o de manera individual. Un sector importante de los asistentes llevaban sus pancartas realizadas de manera individual, con sus propios medios, sólo esperaban sumarse a un contingente con el cual se identificaban: bajo la bandera de su universidad, alguna manta o pancarta. Esto demuestra que el movimiento ha calado muy profundamente entre la juventud. Miles de jóvenes se han lanzado a la lucha política, la lucha ha rebasado y está más allá de los colectivos estudiantiles establecidos en cada una de las escuelas. Miles de jóvenes que no participaban anteriormente en política, en los acontecimientos nacionales, se han lanzado a la calle, comienzan a asistir a asambleas, mitines, brigadas, con la idea de impedir el regreso del partido más autoritario y corrupto al gobierno, detrás del cual se han cuadrado la mayor parte de los empresarios, banqueros y los políticos serviles del sistema.

Cuando el contingente llegó a la plancha del Zócalo nuevamente se repitió el esquema de movilizaciones anteriores. No había un mitin central, no había un templete en donde los miles de asistentes escucharan el siguiente paso a seguir del movimiento, por lo que después de algunos minutos, una parte de los asistentes abandonó el Zócalo, mientras en un pequeño camión de sonido el Sindicato Mexicano de Electricistas organizaba un pequeño mitin. Algunos se fueron al festival cultural por la resistencia y el resto se organizaba como podía en pequeñas asambleas en el Zócalo.

Los compañeros de La Izquierda Socialista hicimos lo propio organizando un pequeño mitin en la esquina de Madero y la Plancha del Zócalo, donde hacíamos un énfasis especial en la necesidad de la unidad de las luchas contra la imposición, en la necesidad de un frente de las fuerzas que confluyen en la Convención Nacional contra la Imposición, el movimiento #YoSoy132, los sindicatos, las organizaciones sociales y el Movimiento Regeneración Nacional, además explicamos que es necesario profundizar la lucha contra la imposición y la necesidad de preparar la Huelga Nacional, lo cual fue bien recibido. Algunos compañeros hablaron en el mitin reafirmando nuestra posición.

Abajo, entre los participantes de base del movimiento, se nota sin duda la necesidad de unidad en la acción, de las luchas y una búsqueda de alternativas para profundizar la lucha.

En los Estados

Las manifestaciones se desarrollaron en 30 ciudades más, incluyendo el extranjero, hubo movilizaciones en  Puerto Vallarta y Guadalajara, Jalisco; Villahermosa, Tabasco; Matamoros, Tamaulipas; las capitales de Puebla, Aguascalientes, Colima, Zacatecas y Querétaro; Chilpancingo y Acapulco, Guerrero; Tijuana y Mexicali, Baja California; Ciudad Juárez, Parral, Nuevo Casas Grandes y la capital de Chihuahua; Saltillo, Coahuila; Toluca, Estado de México, así como en Jalapa, Coatzacoalcos, Córdoba, Orizaba y el puerto de Veracruz. Con una asistencia masiva en Puebla, cerca de 10 mil personas en Monterrey y 4 mil en Morelos.

En la ciudad de León Guanajuato, policías municipales reprimieron y encarcelaron a algunos integrantes de la movilización e impidieron que ésta se desarrollara, de igual manera en la ciudad de Oaxaca policías municipales encarcelaron a algunos asistentes a la marcha. El movimiento en su conjunto debe repudiar el actuar de la policía y los gobiernos, repudiando masivamente la represión contra cada uno de los integrantes del movimiento.

Es necesario profundizar la lucha

Al momento de escribir este artículo los magistrados del Tribunal Electoral han afirmado que las marchas no modificarán su decisión, la cual, sabemos muy bien cual será: ratificaran el supuesto triunfo de Enrique Peña Nieto.

– Es necesaria la unidad en la acción del movimiento, buscar enlaces de los integrantes del Movimiento #YoSoy132 con las asambleas populares promovidas por Morena y Morenaje y viceversa, unificar acciones manteniendo cada quien su bandera, fortalecer las asambleas populares y brigadeos.

– Las jornadas informativas deben ir orientadas a señalar el carácter del financiamiento de la campaña de Enrique Peña Nieto y su claro vínculo con el crimen organizado, como se ha demostrado con el caso Monex, señalar que la imposición implicará la aprobación de las llamadas reformas estructurales, que afectarán los derechos sociales, democráticos y laborales del pueblo y la juventud. La reforma laboral afectará seriamente los derechos laborales de la clase obrera, la reforma fiscal implicará que paguemos más impuestos y la reforma de la seguridad nacional fortalecerá la presencia y el poder de los cuerpos policíacos. Todo esto en beneficio de los banqueros, grandes empresarios y, por supuesto, del crimen organizado.

– Orientar fuerzas y brigadas informativas en las principales zonas industriales de las ciudades, informando a los trabajadores de lo que implicará la imposición de Peña Nieto. Es momento que el movimiento que ha surgido le dispute los espacios corporativos que aún mantiene el PRI, comenzando con las colonias populares y, por supuesto, las zonas industriales.

– Fortalecer las asambleas populares en las delegaciones y municipios, y someter a discusión la preparación de una huelga nacional, estrategias para contactar con los trabajadores para paralizar la economía, los centros industriales, los puertos, las oficinas, el funcionamientos de los bancos, para frenar la imposición.

En esta lucha no tenemos nada que perder, en cambio tenemos un mundo por ganar. Si ellos están dispuestos a imponer a Peña Nieto, nosotros debemos ser capaces de elevar nuestras protestas de manera organizada para impedir una nueva tragedia para el pueblo y la juventud mexicana. O son ellos, o somos nosotros.

Fecha:  22 de julio de 2012