Más de 100 personas asistieron al acto fundacional de la Corriente Comunista de SYRIZA, el viernes 26 de abril a las 7 de la tarde, en la Facultad de Economía de Atenas. Entre los presentes se encontraban cuadros de SYRIZA, de la juventud de SYRIZA, sindicalistas y veteranos del movimiento obrero griego.
La alta participación fue especialmente satisfactoria pese a un problema serio con la sala de reunión inicialmente prevista. Sólo un día antes las autoridades de la universidad anunciaron el cierre de la sala como consecuencia de disturbios violentos provocados por los anarquistas. Los compañeros tuvieron que encontrar otra sala en el último minuto e informar a todas las personas que habían sido invitadas del cambio.
Sin duda, sin esta complicación, habría habido aún más presentes. Pero, en cualquier caso, el gran auditorio estaba lleno de militantes de SYRIZA y de sus juventudes, los cuales estaban llenos de entusiasmo y del deseo de asegurar una orientación sistemática y verdaderamente revolucionaria y socialista al Partido, a partir de la conferencia del próximo mes de julio.
El orador principal fue el escritor marxista y máximo representante de la Corriente Marxista Internacional (CMI), Alan Woods, que tuvo un gran impacto en el pensamiento político de Hugo Chávez, y que es muy popular en Venezuela.
Antes del discurso del camarada Woods, el evento se abrió con un discurso del director del periódico “Revolución” y de la revista “Voz Marxista”, Stamatis Karagiannopoulos. Analizó las razones fundamentales de la fundación de la Corriente Comunista. Destacó el carácter revolucionario de la época y las tareas políticas a las que se enfrenta SYRIZA. Inmediatamente después, explicó las posiciones programáticas básicas que la corriente va a presentar al Congreso del partido en julio.
Entonces Alan Woods dio un discurso sobre las perspectivas para la revolución europea que emocionó a la audiencia. El hablar con claridad y sencillez, proporcionó una visión global de la situación internacional desde la perspectiva del análisis marxista. Alan analizó los recientes acontecimientos en Chipre. Advirtió que se distorsionan los procesos al verlos bajo una óptica nacional y señaló que la crisis de Chipre proporcionó lecciones importantes para Grecia y SYRIZA.
Alan dijo: “Yo estuve aquí hace doce años. Pero el país al que he vuelto es un país diferente, y la gente es también diferente. En el pasado, si yo hubiera hablado de la revolución socialista, la mayoría de la gente habría pensado que estaba un poco loco. Pero ahora, si yo fuera a hablar con cualquier trabajador en Atenas, a cualquier taxista o un pequeño comerciante, me dirían: “Lo que necesitamos es una revolución”, y justificó esta afirmación citando un reciente sondeo de opinión que afirma que el 63 % de los griegos querían “un cambio fundamental en la sociedad”, mientras que otro 23 % quiere una revolución. “Eso significa que el 86 % de la gente quiere acabar con el sistema actual. ¡Esa es una situación revolucionaria!”
El compañero Alan Woods señaló que la crisis del capitalismo está afectando no sólo a Europa, sino al mundo entero, incluidos los EE.UU.: “Si no estuviese todo el mundo hablando de la crisis del euro, estarían todos hablando de la crisis de los EE.UU.”, dijo, y añadió que la deuda total de los EE.UU. era de 17 billones de dólares -más de 100 % de su PIB. También explicó que la crisis no era ni una crisis de crédito ni una de liquidez. En los EE.UU. los grandes monopolios están sentados en casi 2 billones de dólares, los cuales no están invirtiendo en la producción y en la Unión Europea la cifra es de alrededor de un billón. “No invierten, no por falta de capital, sino porque no hay mercados”, subrayó.
Habló de Venezuela, del papel de Chávez y explicó concretamente cómo SYRIZA podría allanar el camino para un rechazo radical a los memorandos y el derrocamiento del capitalismo. Refiriéndose a las perspectivas para Europa, argumentó a favor de la consigna de los Estados Unidos Socialistas de Europa. Señalando el callejón sin salida del reformismo moderno, hizo hincapié en la necesidad de un retorno a las ideas originales del comunismo.
Su discurso dio paso a un animado debate rico en reflexiones y opiniones, en el que se les permitió a los participantes al acto expresar su opinión libremente. Luego Alan Woods respondió a las preguntas. Algunos viejos estalinistas, partidarios de la Corriente de Lafazanis, argumentaron que la solución a los problemas de Grecia era dejar el euro y volver al dracma.
Estos argumentos eran algo irónico, ya que el Partido Comunista de Grecia (KKE) en su reciente congreso de abril, finalmente rechazó la vieja línea estalinista de las dos etapas y eliminó la palabra “patriótico” de su programa. El camarada Woods explicó que la causa fundamental de la crisis no es el Euro, sino el sistema capitalista. “Los dos obstáculos fundamentales que se interponen en el camino del progreso humano son la propiedad privada de los medios de producción y este viejo fósil que es el Estado nacional”, argumentó.
Woods, les advirtió a los defensores del retorno al dracma que sus oraciones pueden verse realizadas al final, si, como es posible que ocurra, Grecia fuese expulsada de la zona euro. Predijo que el dracma de inmediato “se hundiría como una piedra”:
“Como todo el mundo sabe que la única razón de una vuelta al dracma sería la de devaluar la moneda, nadie iba a querer los viejos dracmas. Y puesto que Grecia tiene que importar petróleo y muchas otras cosas, el colapso del dracma significaría una inflación masiva, o incluso hiperinflación, como en Alemania después de 1923. Habría una crisis económica terrible, aún más grave que ahora”, advirtió. “No hay futuro para Grecia sobre bases capitalistas, ya sea dentro o fuera de la eurozona”, dijo.
Alan también explicó que la permanencia en la eurozona tampoco era una solución. Eso sólo significaría una continuación de las actuales políticas de recortes y austeridad para los próximos diez o veinte años y que esta era una receta acabada para una explosión de la lucha de clases que pondría la revolución en el orden del día.
Alan dijo: “Si yo estuviera en el lugar de Tsipras y SYRIZA ganara las elecciones, me iría de inmediato a la televisión a decirle al pueblo griego: me habéis elegido para representar vuestros intereses, y tengo la intención de hacer precisamente eso. Renunciamos al Memorando criminal. No vamos a pagarles un solo euro a los ladrones! Vamos a cancelar inmediatamente todos los recortes, privatizaciones, despidos y otras contrarreformas que les han sido infligidos a los griegos por la Troika.¨
“Con el fin de tomar el control de nuestra propia economía, vamos a expropiar la tierra, los bancos y las grandes empresas sin ningún tipo de compensación. Vamos a introducir un plan de producción que movilice a los desempleados para construir casas, escuelas y hospitales, que la gente necesita. Vamos a introducir el monopolio estatal del comercio exterior y prohibir la exportación de capital de Grecia. Después de todo, eso es lo que acaban de hacer en Chipre!¨
“Eso quiere decir, naturalmente, que van a expulsar a Grecia de la eurozona y de la UE. Van a tratar de estrangular a la economía griega. Esto significará dificultades al principio. Pero el pueblo griego ya está sufriendo terribles dificultades para pagar las cuentas de los banqueros y capitalistas. Estaría dispuesto a hacer sacrificios aún mayores con el fin de defender sus propios intereses.¨
“Todos en Europa se muestran escépticos respecto a todos los políticos, partidos y gobiernos. Si SYRIZA mostrara que realmente dice seriamente lo que dice, y estuviera dispuesta a tomar medidas drásticas para defender a la gente, las masas reaccionarían con entusiasmo. De hecho, si se diera a conocer dicho programa, ¡se bailaría en las calles! Para luchar contra la Europa de los banqueros y capitalistas, será también necesario hacer un llamamiento revolucionario a los trabajadores de Europa a seguir este ejemplo.¨
“Una Grecia socialista no estaría aislada. Los trabajadores de España, Italia y Portugal responderían de inmediato, y pronto serían seguidos por los trabajadores de Irlanda, Francia, Gran Bretaña… y sí, Alemania también. El impacto sería aún mayor que el de la Revolución Rusa de 1917. Se crearían las bases para el derrocamiento del capitalismo y el establecimiento de los Estados Unidos Socialistas de Europa.”
Este discurso fue recibido con una respuesta entusiasta. El estado de ánimo de la reunión fue muy alto, lo que se reflejó en el hecho de que el evento continuó hasta las 10.30 horas, después de haber transcurrido a lo largo de casi cuatro horas. ¡Este fue el mejor comienzo posible para la Corriente Comunista de SYRIZA!