Ahora, extender y coordinar la movilización con toda la comunidad educativa
Las dos primeras jornadas de huelga en Madrid resultaron un completo éxito. Casi un 80% de seguimiento y una manifestación multitudinaria, con presencia de padres en las protestas y un amplio apoyo.
Ahora, extender y coordinar la movilización con toda la comunidad educativa
Las dos primeras jornadas de huelga en Madrid resultaron un completo éxito. Casi un 80% de seguimiento y una manifestación multitudinaria, con presencia de padres en las protestas y un amplio apoyo.
Por segunda vez en una semana, una marea verde de camisetas en defensa de la enseñanza pública salió a las cales de Madrid. En seis días se ha pasado de 50.000 manifestantes a unos 100.000, prácticamente el doble. Estos grandes eventos dejan claro el deseo de salvaguardar uno de los servicios públicos fundamentales por parte, en primer lugar, de los trabajadores de la enseñanza, pero no sólo por parte de ellos.
Además de la gran huelga de Galicia, en el resto de comunidades también ha habido concentraciones y otras protestas en defensa de la educación pública.
El curso pasado finalizó con el anuncio de aumentar las horas de docencia de los profesores y maestros dentro de los planes de recortes de la Generalitat de Catalunya, que afectaban a todos los Servicios públicos, en especial a sanidad y educación.
Durante el mes de julio, y ahora en el inicio del curso, otras comunidades, gobernadas por el PP, han anunciado recortes pronunciados del ¨gasto¨.
Acompaña a la medida de aumentar las horas de docencia (por la no renovación de miles de interinos-eventuales), una campaña de desprestigio de los trabajadores de la enseñanza, especialmente por parte de Esperanza Aguirre, donde se trata de presentar a los profesores como unos privilegiados, que trabajan poco y se oponen a hacer el sacrificio de trabajar 20 horas semanales.
El horario de profesores y maestros
Los horarios de los trabajadores de la enseñanza varían en detalles según las comunidades. En Catalunya por ejemplo, este curso, un profesor de secundaria tiene un horario semanal de 37 horas y media. De éstas, debe dedicar por término general 19 a docencia directa (18 el curso pasado), 6 a reuniones y tareas de horario fijo (guardias, atención a padres, proyectos, mantenimiento de aulas específicas…), 5 horas de horario no fijo (evaluaciones, atención a padres fuera de horario, salidas…) y el resto a trabajo personal no necesariamente presencial en el centro (preparación de clases, innovación, exámenes…)
Un maestro tiene un horario de 25 horas de clase y 5 de permanencia en el centro, el resto de trabajo personal.
Una señora como Esperanza Aguirre, que ha sido ministra de educación, o es muy ignorante o una demagoga, ya que debe conocer que el horario de un docente no es solo el de docencia ¿Por qué entonces dice que solo trabajamos 20 horas? Si resulta que es ignorante, ya le habrán informado de los detalles de la cuestión. Así que, en cualquier caso, lo que busca es desprestigiarnos, demostrando además que desprecia nuestro trabajo.
Toman esta medida para recortar personal, especialmente no sustituir a jubilados: de cada 19 profesores, ahora sobra 1 por ese motivo, unos 2.500 profesores menos en Catalunya. Y eso que el número de alumnos en el sistema aumenta: en el caso de Catalunya, en 21.000 alumnos más este curso. En Madrid, 3.000 profesores menos. Es decir, con menos profesores, debemos hacer el trabajo de atención a la diversidad, tutorías, atención a los padres, innovación, proyectos, orientación, etc, con más alumnos.
No es solo un ahorro económico: es un ataque directo a la calidad de la educación.
En esencia, la medida no supone un aumento teórico de la jornada laboral de 37 horas y media, sino una disminución del tiempo que dedicamos a la mejora de la calidad de la enseñanza pública. En la práctica, sí será un aumento de la jornada, debido a que la mayoría de los profesores quiere realizar bien el trabajo y prepara esas clases extra como es debido, sin desatender otras tareas.
Ya conocemos a Esperanza Aguirre como ministra: recordemos sus declaraciones, su concepción de la educación. Según ella y el PP, ésta debe ser decidida por las “familias” que tienen el derecho a escoger “en libertad”. Para esta libertad existirían los colegios concertados (privados), en su mayoría de la Iglesia, pero por supuesto que subvencionados con dinero público. Para el resto, que tampoco pueden pagar las matrículas extraoficiales que se cobran en los pivado-concertados, se ofrece una escuela pública, cada vez con una calidad ‘de segunda’ y asistencial.
En la práctica, en los últimos años, a pesar de las intenciones de la derecha, a pesar de las dificultades y carencias, en la escuela pública se intentan realizar mejoras con mucha voluntad, los profesores intentan formarse mejor, realizar proyectos, abrir la escuela a los barrios, realizar clases de refuerzo y orientación… Cuando la escuela pública, gracias al trabajo de sus profesionales, funciona, ya no es negocio la privada.
Y es entonces cuando hay que atacarla, desmantelarla.
Otro globo sonda lanzado por Espe, iniciando una reflexión sobre si toda la educación ha de ser gratuita y obligatoria, y hasta cuándo, alerta sobre las intenciones futuras del PP. De nuevo retrocede diciendo que se refería a los masters. Los masters nunca han sido ni obligatorios ni gratuitos. De hecho su precio es prohibitivo y disuasorio. La educación es obligatoria hasta los 16 años ¿Qué pretende? ¿Que se rebaje la edad? ¿O que sea de pago? Desde luego, debería ampliarse la oferta más, especialmente en formación profesional, donde cada vez hay más no admitidos.
Prepararnos para la llegada del PP al poder: generalizar las movilizaciones
¿Cuáles son las medidas del PP en educación? ¿Qué propone para mejorar la escuela? Sólo hemos oído hablar de dotar de mayor autoridad a los profesores (es decir, solucionar los problemas con mano firme) y la cultura del esfuerzo (aquel que no aprende es un vago).
Está admitido por todos los estudios que el modelo finlandés educativo es el que da mejores resultados en todos los estudios. En absoluto consiste únicamente en que los directores tienen mayor poder. Esto está supeditado a otras características fundamentales de este modelo. Se basa en que ningún niño debe quedar atrás en el avance educativo: si tiene más dificultades, tiene más ayuda. No existe la concertada ni la privada prácticamente. La pública es de mucha mejor calidad, tiene más recursos, de los más altos a nivel mundial; en los barrios más difíciles es donde mejores escuelas hay, etc.
Navarra, Madrid, Castilla-La Mancha, Galicia, son solo un experimento de los planes del PP, que ya el curso pasado también empezaron de la mano de CiU en Catalunya: reducir a mínimos la calidad de la escuela pública. A los diferentes gobiernos del PSOE le tenemos que achacar el que, cuando han reemplazado a un gobierno de derechas en diferentes ocasiones (Catalunya, Galicia) no han dado una batalla por revertir este estado de cosas de una manera decidida. Al mismo tiempo, fue Zapatero quien presionó inicialmente a las comunidades autónomas a partir de mayo de 2010 para recortar drásticamente el gasto.
Ya ha habido respuesta en Galicia, con jornadas de huelga convocadas y una manifestación el día 9 de septiembre. En Madrid se realizó una asamblea masiva, con métodos sanos, que recordaban a lo mejor del 15M, es decir, a métodos que vienen en algunos casos de las luchas sindicales de hace dos y tres décadas, con más de 2000 profesores asistiendo, que votaron llevar la propuesta de huelga a sus centros.
No es una defensa de un privilegio laboral. Es la defensa de la calidad de la escuela pública lo que está en juego. Como dijo un compañero de Madrid en una entrevista en la cadena SER, “esta vez hemos reaccionado porque han tocado a los chavales”.
Las palabras de Esperanza Aguirre han indignado a los profesores. Tanto que, consciente ésta de que este insulto iba a provocar el éxito de la huelga de Madrid, decidió pedir disculpas y reconocer que se había equivocado. Pero añadió: la huelga es un ensayo general de lo que harán los sindicatos si gobierna el PP. Nosotros le decimos: no señora Aguirre, lo que es un ensayo, bastante general por cierto, es la política de la derecha de Catalunya y el PP en Valencia, Castilla, Madrid, Navarra, Galicia, etc a la hora de destruir la educación pública.
En manos de los sindicatos de clase está, en buena parte, el que le demos la respuesta que merece. El éxito de las jornadas de huelga de ayer y anteayer, 20 y 21 de septiembre, es un buen primer paso. Ahora se trata de que las jornadas de movilizaciones sean un éxito, que lancen la Marcha a Madrid que hay convocada por los sindicatos de enseñanza para el sábado 22 de octubre.
Esa marcha debe ser un aldabonazo contra el PP en la que los sindicatos pueden amenazar con movilizaciones más generalizadas todavía, incrementando la unidad con otras movilizaciones de la comunidad educativa, padres y estudiantes, el movimiento 15M…, con movilizaciones previas a las elecciones del 20 de Noviembre que tendrán un efecto indudable. Pero se trata, en definitiva, de lanzar un mensaje a la inmensa mayoría de la sociedad, implicándola en las movilizaciones: es el futuro de nuestros chicos, es luchar por nuestro máñana, por un futuro más digno.