"No he recibido un centavo de Venezuela"
El miércoles 8 de diciembre, el camarada Alan Woods fue entrevistado por el servicio mundial de la BBC en Londres y también por la corresponsal de la BBC Mundo en Caracas, Yolanda Valery, artículo que apareció en la página web de la BBC Mundo hoy.
"No he recibido un centavo de Venezuela"
Su recomendación de radicalizar "la revolución" en Venezuela y profundizar la política de expropiaciones parece estar siendo seguida al detalle. Pero niega tener "una relación formal con el Presidente y Miraflores", el palacio de gobierno venezolano. Desde Londres, Alan Woods, un ideólogo marxista, a quien algunos consideran el nuevo asesor de Hugo Chávez, opina y aconseja. Sin carácter vinculante.
"Me agrada estar de moda en Venezuela", dice, interrogado sobre la implementación de su receta. "No he recibido ni un solo peso de ninguna clase, de parte de nadie (en el gobierno)", insiste, en conversación telefónica con BBC Mundo. Asegura que sus libros, artículos y viajes a Venezuela los paga la organización Corriente Marxista Internacional (CMI), que lidera.
"Y por cierto, creo que el presidente Hugo Chávez no necesita asesores. El único asesor que le interesa es el pueblo venezolano", opina.
Ideas crecientes
En este sentido, Woods desestima las críticas tanto de portavoces de oposición como de algunos simpatizantes del oficialismo, que consideran que sus ideas representan a una tendencia minoritaria dentro del marxismo, que no encaja con la realidad nacional.
Y por cierto, creo que el presidente Hugo Chávez no necesita asesores. El único asesor que le interesa es el pueblo venezolano. Alan Woods
"Sobre Venezuela hay muchos extranjeros que opinan. Por ejemplo, CNN, o la prensa norteamericana. Un 98% son hostiles, defienden intereses económicos y demás que no comparto. Soy extranjero, defiendo otra visión, más favorable a la revolución (…) No sé si las ideas que represento son minoritarias o no, pero la influencia de las ideas socialistas está creciendo, no tengo duda", señaló.
También restó importancia a la posibilidad de terminar siendo cuestionado o "desheredado" por la "revolución", como ha ocurrido con otros intelectuales en el pasado.
"Simplemente defiendo lo que pienso es correcto. Intento aportar ideas. Si estas ideas están aceptadas, me alegro mucho; si no, ¡qué le vamos a hacer!. (…) Finalmente, es el pueblo de Venezuela el que tiene que decidir", alega.
El punto de partida de esas ideas es una crítica. "Creo que en Venezuela se han hecho cosas muy positivas, pero se trata de una revolución a medias", afirma.
Receta
Críticos locales han dicho que la adopción de políticas más radicales se explica por las elecciones parlamentarias de septiembre, cuyo resultado no satisfizo las aspiraciones oficialistas. Y a un intento de abortar una posible derrota en las presidenciales de 2012. ¿Sus recomendaciones son una respuesta a ese temor?
Mi opinión particular es que eso (radicalizar) facilitaría un relanzamiento de la revolución, animaría sus bases. (Pero) el resultado de unas elecciones nunca está garantizado. Depende de la voluntad del pueblo. Alan Woods
Para Woods, el obstáculo principal es lo que él llama la "dictadura de la oligarquía". "Me parece que la oligarquía y los terratenientes son una fuerza contrarrevolucionaria que busca sabotear un gobierno democráticamente elegido", insiste. De ahí que defienda una política de expropiaciones de las tierras, bancos y sectores clave en manos de grandes potentados.
En cuanto a lo primero, habla de una reforma agraria profunda. Sobre lo segundo, propugna la creación de un banco único. En cuanto a los alimentos, opina que es un "escándalo" la dependencia de las importaciones de productos agrícolas, algo que no puede explicarse.
En resumen, señala, "la condición sine qua non de una agricultura próspera es la liquidación de la propiedad de grandes ricachones y la creación de una agricultura moderna y próspera".
Con todo, se queja de que los empresarios no inviertan en Venezuela, en tanto la inversión es necesaria "para combatir cosas como el desempleo".
Considera que no lo hacen, no por temor a ser expropiados o por inseguridad jurídica, sino por haberle "declarado una guerra al presidente Hugo Chávez desde el primer momento". Pide que se observe que sólo recientemente Chávez viene hablando de socialismo y aplicando medidas de nacionalización, mientras que la ausencia de la participación privada es notable durante los 11 años que ha durado la "revolución bolivariana".
El presidente Chávez ha hecho muchos llamados a la responsabilidad y al patriotismo (a los inversionistas y empresarios privados). El resultado ha sido poco más o menos cero. Alan Woods
¨Ese hecho está causando estragos en la economía nacional. La única manera de combatir este problema es que el gobierno se haga cargo de la situación productiva", piensa.
En este sentido, predica una "planificación" al estilo de la ex Unión Soviética. Aunque señala que en ese caso, la planificación se fue por un despeñadero a manos de la burocracia y corrupción.
-¿Cree usted que es posible que haya síntomas del mismo problema en el caso venezolano, dados los numerosos casos denunciados de corrupción?
-El caso es que la burocratización, la corrupción, no son algo exclusivo de una economía nacionalizada y planificada (…) Es cierto que hay un problema de burocracia y corrupción que es necesario combatir (…) Creo que la única manera es que haya un control democrático de la clase trabajadora.
-Uno de los problemas centrales de la revolución bolivariana es el Estado. No es producto de la revolución, lo hemos heredado de la Cuarta República (los gobiernos anteriores de la era democrática). Esa burocracia no es capaz de llevar a cabo medidas socialistas ni revolucionarias. El problema del Estado tenemos que arreglarlo. Pero sólo se puede lograr desde abajo.
Medios y clase media
Woods ha dicho también que hay que ganarse a la clase media, pero no cediendo a las exigencias de contrarrevolucionarios enmascarados como "reformistas". Para él, es comprensible que una parte de ella rechace el socialismo por miedo a que les quiten sus pertenencias. Pero considera que debe hacérsele ver que ese sistema, "lejos de aplastar a la clase media, la van a ayudar", con medidas como créditos baratos.
En cuanto al papel de los medios de comunicación, pide controles a quienes "llevan diez años atacando, hostigando al gobierno".
-El propio presidente Chávez exhortó recientemente al canal oficial VTV a recibir denuncias del pueblo, lo que significa que no lo está haciendo, como sí ciertos canales privados. ¿Eso no es una forma de ejercer el control por las bases, que usted predica?
-Soy partidario del pluralismo y de que la gente tiene derecho a emitir diferentes opiniones. Lo que no soy es partidario es de permitir ataques constantes. Eso no es libertad sino un abuso. El gobierno tomará las medidas que considere pertinentes.