Activismo sindical: política clasista y política de aparato

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Ponenos a disposición de nuestros lectores dos informes breves. Uno hace referencia al inicio de un proceso de acercamiento entre dos corrientes sindicales clasistas: la Corriente politico-sindical "Rompiendo Cadenas" y el Encuentro Sindical de Base (ESB), y otro sobre las elecciones celebradas en ferroviarios, donde las listas de izquierda fueron divididas.

Avances en la confluencia del activismo clasista

Los días 15 de noviembre y 8 de diciembre se concretaron sendos encuentros entre representantes de la Corriente político-sindical "Rompiendo Cadenas" y del Encuentro Sindical de Base-El Mortero (donde participamos los compañeros de El Militante). La idea es comenzar un proceso de acercamiento, coordinación y trabajo en común.
Se analizaron las consecuencias que tendría la crisis capitalista mundial y la respuesta de los trabajadores ante las mismas.
El intercambio tuvo grandes coincidencias tanto en el diagnóstico como en la necesidad de una posición de clase para enfrentar la crisis.  
Las reuniones se desarrollaron en un marco de camaradería y podemos adelantar que en los próximos días comenzará el accionar conjunto de estos agrupamientos de trabajadores estatales, docentes, encargados de edificios, bancarios, petroleros, metalúrgicos, de comercio, universidades, desocupados, etc. de distintas regiones del país (Gran Buenos Aires, Capital, Rosario, Bahía Blanca, Chubut, La Plata, etc.).
Ambos agrupamientos comprometimos nuestra participación en la marcha convocada por la CTA el 12 de diciembre a Plaza de Mayo.

Elecciones en ferroviarios: un sectarismo criminal

Las elecciones ferroviarias del área metropolitana de Buenos Aires estuvieron signadas por la división entre la Lista Bordó y un desprendimiento de la misma, la Lista Violeta. Los principales impulsores de la primera, dirigida por el "Pollo" Sobrero, militan en el grupo Izquierda Socialista (IS), escindido del MST en 2006, y la segunda lista fue impulsada por este último
La división, que sólo favoreció a la burocracia sindical, ocurrió por los estrechos y mezquinos intereses de aparato de ambos grupos políticos, que dirimen en el frente gremial sus discrepancias y enfrentamientos, tomando de rehenes a los trabajadores en sus disputas.
Fruto de esta política criminal, el activismo clasista perdió el cuerpo de delegados del Ferrocarril Mitre, que había sido ganado por la Lista Bordó cuando se presentó unida en las elecciones anteriores, junto a los Cuerpos de Delegados del Sarmiento  y del Belgrano Norte, que aún mantiene la Bordó tras estas elecciones.

Sólo son progresivas las políticas que tienden a unificar la acción de clase, pero aquéllas que colocan el prestigismo de organización sobre los intereses obreros son indignas y deben ser denunciadas del modo más resuelto.