El gobierno “nacional y popular” de Kirchner ha aumentado las tarifas de luz y gas. Si bien no alcanzan a las tarifas residenciales, estos aumentos se trasladarán a los precios, afectando especialmente a los sectores de menores ingresos (desocupados, trabajadores y sectores medios empobrecidos). Por otro lado, el gas natural comprimido o GNC aumentará un 10 %. En este caso afecta a un millón trescientos mil propietarios de vehículos. También a fin de este mes se acordó un aumento de la nafta entreun 3 y un 5%. A todo esto se suman el aumento del pan (5 a 10 %), la carne(10%) y los taxis (12,5 %). También aumentarán las prepagas en un 9 % en promedio, medida que afectará a 2,5 millones de usuarios. Y en un futuro cercano le aplicarían el IVA, con l
Se cae otra de las promesas del gobierno K
El gobierno "nacional y popular" de Kirchner ha aumentado las tarifas de luz y gas. Los incrementos de la energía eléctrica oscilan entre el 15 y el 35 por ciento según los niveles de consumo. Las subas para el gas irían del 12 al 25 % según las regiones del país. En estos casos afecta a los grandes y medianos usuarios industriales y comerciales. Además el aumento será retroactivo al primero de febrero.
Con estas medidas no se resuelven todos los reclamos de las privatizadas. Las distribuidoras (Metrogas, Gas Naturel ,Edesur y Edenor) y las transportistas (TGN, TGS o Transener) no se benefician con el ajuste. Los grandes ganadores son los generadores de electricidad (El Chocón, Atucha; Central Costanera, entre otros) y los productores de gas (Repsol-YPF, Petrobras y Total).
Con respecto a Repsol-YPF, tuvo utilidades de más de 2.500 millones de dólares durante el año 2003. Una cifra nunca antes alcanzada. Los dos tercios de las utilidades de esta multinacional provienen de la Argentina. Esto obedece al bajo costo de extracción del petróleo en nuestro país.
El gas natural comprimido o GNC aumentará un 10 %. En este caso afecta a un millón trescientos mil propietarios de vehículos. Además restringirían la venta de GNC para autos en invierno. Así se evitarían los cortes en los días de menor temperatura. Esto se debe a que las multinacionales prefieren exportar el gas a venderlo en el mercado interno, situación que acarreará un déficit del combustible. Aun a pesar que la producción en 2003 fue récord: más de 50 mil millones de metros cúbicos. Se piensa en importar mayor cantidad de gas boliviano. Aquí vemos nuevamente cómo las empresas hacen negocios fabulosos mientras nos condenan a pasar frío. Todo con la complicidad del gobierno.
Si bien no alcanzan a las tarifas residenciales, estos aumentos se trasladarán a los precios, afectando especialmente a los sectores de menores ingresos (desocupados, trabajadores y sectores medios empobrecidos).
Las tarifas de colectivos y trenes no han aumentado debido a los subsidios estatales que reciben estas empresas. Algo que ya hemos denunciado desde estas páginas. Y que representan alrededor de un 0,5% del PBI.
A todo esto se suman el aumento del pan (5 a 10 %), la carne(10%) y los taxis (12,5 %). También aumentarán las prepagas en un 9 % en promedio, medida que afectará a 2,5 millones de usuarios. Y en un futuro cercano le aplicarían el IVA, con lo que volverán a aumentar. Esto es por presión de los organismos financieros internacionales, que buscan incrementar la recaudación fiscal a cualquier costa.
Clarín nos informa que carne, prepagas y GNC ponen un piso del 1 por ciento a la inflación de marzo.
Finalmente a fin de este mes aumentaría la nafta entre un 3 y un 5%.
Al igual que en anteriores intentos de ajustes, las entidades de usuarios cuestionan la imposición de la suba por decreto cuando aún no han finalizado las renegociaciones de los contratos. Nuevamente, más ajuste y menos democracia van de la mano.
Una vez más se sigue descargando la crisis en las espaldas de los trabajadores. A movilizarse para impedir esta política de sometimiento a los dictados del FMI del actual mandatario, pese a que vaya acompañada de un discurso de intransigencia y autodeterminación.
Desde El Militante proponemos:
Anulación de todo incremento tarifario.
Reestatización de las empresas de servicios públicos sin indemnización y bajo control obrero.
Nacionalización de toda la industria petrolera, para que las fabulosas ganancias que hoy obtienen los pulpos empresariales privados usando un recurso no renovable, se vuelquen en el mejoramiento del nivel de vida de las familias obreras.