10 años sin el compañero Jorge Julio López y con el genocida Etchecolatz libre y en su casa

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El Terrorismo de Estado impuesto por el imperialismo norteamericano durante el Gobierno de Nixon que ha fuerza de violaciones, secuestros y asesinatos selectivos de trabajadores, estudiantes, intelectuales y referentes sociales, allanara el terreno para el subsiguiente des-financiamiento y endeudamiento estatal y la entrega de los activos del país en pos de los intereses de Estados Unidos. Aún sigue cobrándose desapariciones forzadas de trabajadores argentinos y testigos de las torturas y los campos de concentración de la última dictadura cívico-militar.

 

Este domingo, 18 de septiembre del 2016, se cumplen 10 años de la segunda desaparición del compañero Jorge J. López -la primera fue, durante su secuestro en los ’70 por la dictadura cívico-militar impuesta por U.S.-

El compañero López “desapareció” luego de haber prestado testimonio en contra del torturador y genocida, y ex comisario policial Miguel Etchecolatz. Jorge J. López fue un testigo clave para condenar al asesino Etchecolatz, porque brindó su importante testimonio en el primer juicio después de la anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.

10 largos años pasaron de manifestaciones, luchas sociales y pedidos de esclarecimiento sobre la desaparición del compañero López, sin que hasta la fecha haya un sólo imputado o condenado por la desaparición del compañero.

En diametral oposición, el Gobierno  del empresario Mauricio Macri, ha flexibilizado el cumplimiento de la condena de los genocidas; y el ex comisario Etchecolatz desanda su libertad en su casa y con cuidados médicos.

Aquellos derechos que no sólo, no tuvieron sino que les fueran negados y arrancados de cuajo, aunado con perversas vejaciones a nuestros compañeros torturados, muertos y desaparecidos.

A 10 años de la desaparición del compañero López, desde la Corriente Socialista Militante, sección Argentina de la Corriente Marxista Internacional repudiamos enérgicamente la falta de esclarecimiento sobre su desaparición, y así mismo exigimos el cese de los beneficios y flexibilización en la detención de los genocidas de la última dictadura cívico-militar del Plan Cóndor impuesto por el imperialismo norteamericano.

Así también, llamamos a la resistencia a trabajadores, estudiantes y referentes sociales para frenar las nuevas intentonas del gobierno argentino acerca del establecimiento de un Estado Parapolicial en pos de la persecución política de trabajadores y estudiantes.

¡Jorge Julio. López, presente!

¡30.001 compañeros desaparecidos, presentes!

¡Ahora y siempre! Sin perdón ni olvido.