Los trabajadores del subte se encuentran en estado de asamblea permanente para analizar las posibles medidas frente al procesamiento penal del delegado Néstor Segovia. Es por eso que queremos alertar a la opinión pública, a los usuarios, que no descartamos medidas de fuerza para defender a un compañero y para evitar que se les haga costumbre esto de criminalizar a los laburantes que reclaman mejoras en su trabajo.
Los trabajadores del subte se encuentran en estado de asamblea permanente para analizar las posibles medidas frente al procesamiento penal del delegado Néstor Segovia.
No nos sorprende que la concesionaria Metrovías haya llevado la situación a este extremo, ya que las imputaciones contra Segovia y otros cinco delegados del subterráneo -a estos últimos se les dictaminó falta de mérito- fueron promovidas por la empresa durante el 2007, cuando el cuerpo de delegados denunció públicamente el peligroso estado del material rodante y solicitó que se mejore el mantenimiento de la flota de trenes.
No nos sorprende la actitud de la Sala VI de la Cámara Criminal y Correccional, porque la justicia argentina no tiene la costumbre de ser justa.
No nos sorprende, tampoco, la indignación que se respira en estos momentos en los túneles, en los sectores de trabajo y en los cuartos de descanso subterráneos, porque los compañeros saben quién es quién en este teatro judicial que montaron los poderosos de siempre.
Es por eso que queremos alertar a la opinión pública, a los usuarios, que no descartamos medidas de fuerza para defender a un compañero y para evitar que se les haga costumbre esto de criminalizar a los laburantes que reclaman mejoras en su trabajo.