La independencia de Kosovo agudiza las tensiones nacionales en la ex-Yugoslavia

Nuestra alternativa no es la independencia de Kosovo sobre bases capitalistas, que será una colonia del imperialismo norteamericano y europeo y dará inicio a un nuevo período de limpiezas étnicas y tensiones nacionales en los Balcanes. Pero tampoco defendemos la opresión nacional de los albaneses que pueblan mayoritariamente Kosovo a manos de la clase dominante Serbia. Nuestra alternativa es la unión voluntaria de los pueblos balcánicos sobre la base de una Federación Socialista. La lucha por los ders derechos democrático-nacionales y la lucha por el socialismo no pueden ser separadas. La independencia de Kosovo no resolverá la cuestión nacional albanesa, sino que complicará mucho más los conflictos nacionales en los Balcanes.
Ahora, la minoría serbia que habita el norte de Kosovo está planteándose la independencia y unirse a Serbia.
La independencia de Kosovo es una farsa. El 50% de la población está desempleada, el crimen y la corrupción son escandalosas, y sólo las tropas imperialistas que ocupan Kosovo garantizan la supervivencia del Estado. No pasará mucho tiempo antes de que los kosovares pongan su pan diario por delante de sus colores nacionales.
En respuesta a la declaración de independencia de Kosovo, la burguesía serbia ha lanzado una campaña furiosa de chauvinismo reaccionario contra los albaneses que sólo trata de enloquecer a la clase obrera serbia para desviarla de la lucha contra la explotación capitalista.
La independencia de Kosovo amenaza la integridad de Bosnia-Herzegovina (ex-república yugoslava). Los dirigentes serbio-bosnios están tocando también la melodía del "derecho de autodeterminación" para formar la República de Srpska. La reunificación potencial de la República Srpska con Serbia, en la que insiste Belgrado como compensación por la pérdida de Kosovo, arrastraría a Croacia al torbellino exigiendo lo mismo para la minoría croata de Bosnia, y dejaría a los bosnios musulmanes colgados en medio de la nada. Un Kosovo independiente también cuestionará la situación de la población albanesa en Macedonia (otra ex-república yugoslava). Después está la minoría albanesa del Valle de Preservo en el sur de Serbia. La lista continúa y continúa….
Nuestra alternativa no es la independencia de Kosovo sobre bases capitalistas, que será una colonia del imperialismo norteamericano y europeo y dará inicio a un nuevo período de limpiezas étnicas y tensiones nacionales en los Balcanes. Pero tampoco defendemos la opresión nacional de los albaneses que pueblan mayoritariamente Kosovo a manos de la clase dominante Serbia.
Nuestra alternativa es la unión voluntaria de los pueblos balcánicos sobre la base de una Federación Socialista. La lucha por los derechos democrático-nacionales y la lucha por el socialismo no pueden ser separadas.
En una federación socialista, con genuina democracia obrera, ningún pueblo (serbios, albaneses, croatas, bosnios, eslovenos, montenegrinos, macedonios, etc.) tendría interés en oprimir a otro. Cada pueblo tendría su autonomía, y la elevación del nivel de vida y el avance de la sociedad eliminarían las suspicacias y los viejos odios nacionales, que fueron azuzados artificialmente por las camarillas de ex-estalinistas, capitalistas e imperialistas, para mejor explotar a las masas trabajadoras de la región.
La tarea es unir a la clase obrera de la ex-Yugoslavia en un combate común con todas las camarillas capitalistas de la zona y contra el imperialismo. Apelamos, para ello, a la formación de partidos obreros de masas en cada país para librar este combate y defender los derechos democráticos, así como las conquistas sociales que la reintroducción del capitalismo ha eliminado.