La escalada de violencia ahora suma patotas rentadas
El crimen de Jonathan Bolig a manos de Ricardo Darío López, policía de la comisaría 4º de Gregorio de Laferrere, registró el más alto escalón de violencia desde la muerte de Joni. En el atardecer de ayer, domingo 21 de noviembre, una patota presuntamente vinculada al negocio de la droga en la zona, atacó a Andrés, hermano mayor de Joni, quien reside a pocas cuadras de sus padres. La escalada de violencia ahora suma patotas rentadas
El crimen de Jonathan Bolig a manos de Ricardo Darío López, policía de la comisaría 4º de Gregorio de Laferrere, registró el más alto escalón de violencia desde la muerte de Joni. En el atardecer de ayer, domingo 21 de noviembre, una patota presuntamente vinculada al negocio de la droga en la zona, atacó a Andrés, hermano mayor de Joni, quien reside a pocas cuadras de sus padres.
Enterado, el padre fue en su ayuda y lo llevó hasta el domicilio familiar. Una vez allí, los agentes del Ministerio de Justicia provincial que custodian a la familia Bolig desde hace una semana, fueron alertados de la situación. Minutos más tarde, la patota, que venía siguiendo a Juan y su hijo, comenzó a apedrear la casa de los Bolig y a tirotearse con los custodios.
Todo esto ocurre apenas siete días después de que tres policías intimidaran a los padres y la hermana de Joni insultándolos, propinándoles gestos obscenos, amenazando con allanar la vivienda y hasta simulando la ejecución del padre. Sin embargo, y a pesar de los sucesos ocurridos, el Hábeas Corpus Preventivo presentado por la representación legal de la familia Bolig, fue desestimado por el juez Hugo Andrés Martínez y el secretario Héctor Hugo Bianchetti, del Juzgado Correccional 4 de La Matanza.
La escalada de terror a la que se enfrentan familiares y amigos de Jonathan, aumenta en tanto se van sorteando escollos para el esclarecimiento del asesinato producido en enero de este año.
La organización y movilización de los familiares y amigos de las víctimas de impunidad junto a organizaciones sociales, políticas, juveniles y de DDHH, ha logrado – primero – la atención que en principio se negara de parte del juez Gustavo Banco, y, en agosto, que la causa se elevara a juicio oral y público. Ahora se lucha por el cambio de carátula de “homicidio culposo” a “dolo eventual”, para evitar de esa manera la posible pena leve y hasta excarcelación que admite la primera.
En este contexto la patota intentó amedrentar con inusitada violencia la acción de una familia de luchadores que aspiran sencillamente a obtener justicia por la muerte de su hijo. Pero, más que claro está, el camino a la cárcel para Ricardo Darío López implica enfrentar la impunidad con la que se mueven los efectivos de la comisaría 4º de Laferrere encubiertos por el aparato político y judicial.
Por todo ello, denunciamos ahora, la complicidad manifiesta del estado municipal, provincial y nacional en el accionar de la policía y su brazo espurio, que intenta poner sobre el caso Jonathan Bolig un manto de silencio.
Asimismo los hacemos responsables absolutos de las consecuencias que acarreen la violencia física, verbal y/o psicológica que la familia y los amigos de Joni sufran de ahora en más.
• ¡Basta de asesinatos llevados por la policía en los barrios!
• Esclarecimiento y justicia para todos los casos de impunidad
• Por un cambio de caratula de homicidio culposo a dolo eventual
• Basta de patotas parapoliciales
Familiares y amigos de las víctimas de impunidad
Contactos:
Norma Peralta (madre de Joni): 15-5102-4203
Juan Bolig (padre de Joni): 15-3435-6611
Liliana Kunis (abogada de la familia): 15-3562-5190