Una vez más, repudiamos la criminalización de la protesta por parte del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. No es un hecho aislado: es parte de la política represiva de un proyecto de ciudad de exclusión.
La Policía Metropolitana fue presentada como una Fuerza nueva, pero a diario demuestra que no hace más que copiar y reproducir lo peor de la vieja Policía: represión, gatillo fácil, accionar como patotas, agentes de civil. Y no nos olvidamos de que Mauricio Macri quiso profundizar su política represiva con armas tasser: picanas portátiles, compra que fue frenada por la justicia y el repudio del pueblo.
Pero esa Fuerza nunca iba a poder ser nueva, porque fue diseñada por su
primer director: Jorge “El Fino” Palacios, quien tuvo que renunciar,
repudiado por su participación en la última dictadura cívico-militar y su
colaboración con la impunidad en la causa por la AMIA. Junto con Mauricio
Macri, está procesado por las escuchas ilegales hechas desde el Gobierno
porteño a familiares de víctimas de ese atentado y en la causa AMIA por
encubrimiento, abuso de autoridad y de violación de medios de prueba.
Además, el Fino Palacios está denunciado por su responsabilidad en la
represión criminal del 19 y 20 de diciembre de 2001.
A falta de la nefasta UCEP (Unidad de Control de Espacios Públicos), Macri
reprime con la Metropolitana, con una práctica híbrida entre esas patotas de
civil que actuaban violentamente y por la noche para desalojar y reprimir a
personas privadas de su derecho a una vivienda, con una Fuerza armada. Lo
vimos en estos días en el Parque Centenario: los manifestantes reprimidos
eran arrastrados por la calle por agentes de civil y los vecinos que
estuvieron ahí denunciaron también que ninguno de los miembros de la
Metropolitana estaba identificado.
No es novedad: las políticas de Macri no acompañan al proceso histórico de
transformación político-social que vive nuestro país. Esta semana vimos, una
vez más, cómo acciona el PRO ante la protesta social. El eje de la discusión
es mucho más que un parque enrejado: es el proyecto de ciudad que queremos,
que no puede tener ni un resquicio de las prácticas criminales de las
Fuerzas de Seguridad.
Repudiamos la criminalización de la protesta y la represión a la prensa,
exigimos que la Metropolitana sea una Fuerza cuyo accionar se ajuste a un
Estado de Derecho, y seguimos convocando a militar por otro proyecto de
ciudad, en el que los derechos humanos sean el pilar fundamental de la
política de Gobierno.
H.I.J.O.S. Capital (Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el
Olvido y el Silencio)
Adhieren: UTE – Frente Nuevo Encuentro – Movimiento Evita – Participación
Urbana -Frente de Mujeres K – Radio Gráfica – Flores Solidario – La
Capitana – Colectivo Militante Mesa Nacional por la Igualdad – Federación
Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT) – La Nunca Menos –
Comisión de Trabajo por la Reconstrucción de Nuestra Identidad – Picado
Nacional y Popular – Mesa por el Juicio y Castigo a los genocidas – Corriente Socialista Militante