Para derrotar a la maquinaria priista debemos aplicar una política de clase
Se realizó la esperada contienda electoral en el Estado de México (Edomex), el Programa de Resultados Preliminares del IFE (con 98.73% del conteo de las casillas) da 62.51% de los votos a Eruviel Ávila (PRI-PVEM-PANAL) que equivale a 2.835.750 de votos, frente a los 959.116 sufragios de Alejandro Encinas (PRD-PT-Convergencia) que representan 21.14%. El PAN colapsó alcanzando 565 mil 338 votos, que representan el 12.46%.
Para derrotar a la maquinaria priista debemos aplicar una política de clase
Se realizó la esperada contienda electoral en el Estado de México (Edomex), el Programa de Resultados Preliminares del IFE (con 98.73% del conteo de las casillas) da 62.51% de los votos a Eruviel Ávila (PRI-PVEM-PANAL) que equivale a 2.835.750 de votos, frente a los 959.116 sufragios de Alejandro Encinas (PRD-PT-Convergencia) que representan 21.14%. El PAN colapsó alcanzando 565 mil 338 votos, que representan el 12.46%.
El PRI habla con bombos y platillos de un resultado histórico nunca antes alcanzado en esta entidad pero, como lo explicó Alejandro Encinas en su primera conferencia de prensa después de las elecciones, este resultado es producto de las viejas prácticas electorales priistas y algunas otras nuevas que intentan evitar el cambio, con un financiamiento millonario que ha convertido a esta campaña, según palabras del candidato de la izquierda, en la más cara de la historia de toda América Latina.
Encinas empezó su conferencia diciendo que el dinosaurio seguía vivo pero también señaló, casi al final de su discurso, que hoy inicia el principio del fin para ellos, que la lucha continúa. Encinas dijo que se denunciarán legalmente las irregularidades y que si es necesario darán movilizaciones y que no se irá del Edomex, seguirá luchando contra el PRI y realizará una gira por cada uno de los 125 municipios de la entidad.
La campaña en los medios de comunicación iba orientada a favorecer la abstención y así facilitar mejores resultados para las estructuras corporativas priístas. No se llegará al 50% de participación. Querían dar la imagen de que todos los políticos son iguales y no valía la pena votar. Por otro lado la compra de votos fue descarada. La represión y hostigamiento contra la izquierda también lo fue, hubo 15 compañeros detenidos durante las elecciones. El tribunal Electoral del Estado de México solapó estas fraudulentas prácticas del PRI. Estas elecciones no reflejan mecánicamente lo que ocurrirá en el 2012, el aparato priísta nacional pudo orientarse a golpear en un punto, destinando operadores políticos y recursos económicos de todo el país. Si bien hubo procesos electorales en otros estados, la maquinaria se orientó al Edomex.
La burguesía no podía permitir que la izquierda gobernara el DF y Edomex juntos, se juega el futuro en las elecciones presidenciales del 2012. Para la izquierda estas elecciones eran el ensayo para dichas elecciones, mostraría una importante pero parcial fotografía del estado de fuerzas con que cuenta. El PRI y la burguesía movilizaron todo su aparato para que la diferencia fuera muy amplia, quieren desmoralizar a la clase trabajadora y dar la idea de que no es posible vencerles en el 2012, pero no se puede hacer un análisis mecánico ni dar por descontado el triunfo de la izquierda.
No podemos negar los resultados ni culpar solamente al PRI por ellos. La campaña de la izquierda fue muy militante y se impulsó por parte de los trabajadores de base de los partidos políticos de izquierda y el MORENA, en oposición al aparato burocrático del PRD que boicotió el trabajo para asestar un golpe al obradorismo dando la impresión de que era mejor haber ido en una alianza con el PAN. Esto muestra lo frágil que es una unidad de las izquierdas en abstracto. Los chuchos, el ala de derecha del partido representada por corrientes como NI y ADN, son un obstáculo objetivo para la lucha de los trabajadores. Los militantes de base hicimos todo lo posible para el triunfo, los culpables de este resultado son los burócratas oportunistas infiltrados en el PRD e incluso dentro del MORENA.
Por otro lado MORENA planteó correctamente un programa de reformas adoptado por Encinas que, de realizarse, sería un paso adelante y planteaba fortalecer la organización formando miles de comités municipales. Aunque a nivel nacional el desarrollo del MORENA es irregular aquí se mostró que aun falta mucha organización, se demostró que es muy importante contar con cuadros políticos capaces y sobre todo demuestra que ideas correctas no se pueden materializar de manera firme con métodos reformistas. Se requiere además de un programa de clase, una política y métodos de clase. Estos resultados son una enorme señal de alarma que nos muestra la necesidad de que el MORENA rompa con los métodos reformistas y aplique métodos revolucionarios basados en la organización y la lucha cotidiana por la defensa de nuestra clase con sólidos comités de base. Nuestro movimiento debe actuar democráticamente y no funcionar bajo los vicios del PRD basados en acuerdos de grupos que anteponen intereses mezquinos de una minoría a los intereses generales de la clase trabajadora. Un giro de política en este sentido es condición fundamental si en verdad queremos derrotar a la burguesía en el 2012.
En el Edomex la organización de la izquierda no es la más fuerte, pero pese a las adversidades la campaña fue impulsada firmemente por los militantes más consecuentes de la base, estos resultados abrirán muchas preguntas y cuestionamientos. Las críticas contra la burocracia dentro del PRD y del mismo MORENA se incrementarán. Se profundizará la crisis dentro del partido. Se darán posibilidades para el fortalecimiento de las tendencias de izquierda que sean más consecuentes y los oídos de las bases estarán atentos, lo que abre la posibilidad del desarrollo de las fuerzas del marxismo a lo interno del PRD y el MORENA.
Es falso que no podamos derrotar al PRI en el 2012, pero las elecciones en el Edomex son una enorme advertencia. No hay tiempo que perder, necesitamos fortalecer la organización desde las bases y el MORENA debe aplicar una política revolucionaria. Debemos romper con los elementos oportunistas dentro del movimiento. La contienda del 2012 no será sencilla, pero el descontento de los trabajadores del campo y la ciudad es real, las ganas de cambio profundo se mantienen en la población trabajadora. No debemos caer en desmoralización, basándonos en las mejores lecciones de las derrotas podremos encontrar el camino a seguir hacia la victoria. Es necesario un giro radical, es necesario un programa y políticas de clase y revolucionarios dentro del MORENA y el PRD.
4 de julio de 2011