Es por esto que siendo una medida necesaria y correcta la convocada por la CTA, creemos que debe profundizarse. No solamente en el plan de lucha, sino además en la convocatoria a todos los trabajadores. La crisis, más que nunca, impone la Unidad de abajo hacia arriba de los trabajadores y por esto debe apelarse desde la CTA y la Constituyente Social a que los trabajadores y los dirigentes de la CGT.
En la jornada nacional de lucha del 22 de abril de la CTA, en la provincia de Buenos Aires hubo más de 135 piquetes, movilizaciones, volanteadas, radios abiertas, y un paro que se sintió fuerte en escuelas, administración Publica, los tribunales y los 77 hospitales bonaerenses, donde la adhesión fue superior al 90%.
Los principales cortes se realizaron en el acceso y bajada de la autopista Buenos Aires-La Plata, Puente La Noria y Avenida del Libertador, mientras que los principales accesos a la ciudad de Buenos Aires también fueron tomados por los trabajadores. Entre ellos se realizó un masivo piquete de 5 mil compañeros y compañeras en el Puente Pueyrredón, además de Puente Avellaneda, Victorino de la Plaza y Autopista. En San Martín se realizo el corte de la General Paz.
En Vicente López se cortó el Puente Saavedra. En San Miguel se obstruyó la Panamericana. En Zárate fue tomado el acceso a la ciudad. En Ezeiza, la Autopista Ricchieri fue inundada por columnas de manifestantes. En Moreno, se cortó el Acceso Oeste.
En este marco, en plena movilización desde el Puente Pueyrredón, el secretario general de ATE y la CTA provincial Hugo "Cachorro" Godoy adelantó que los trabajadores volverán al paro de no obtener respuestas satisfactorias y reiteró la necesidad de que "se establezca una inmediata y urgente convocatoria al Consejo del Salario mínimo, una Asignación Universal por hijo para los menores de 18 años, que los mayores adultos que no tienen derechos jubilatorios puedan recibir una asignación universal, que se prohibida por 180 días el despido de los trabajadores y haya convenciones colectivas libres sin ningún tipo de condicionamientos".
Así también se produjeron movilizaciones y actos en todas las grandes ciudades del país, La Plata, Rosario, Córdoba, Mendoza, Santiago del Estero, etc.
Pablo Micheli planteó que esta crisis generada por los capitalistas no la vamos a pagar nosotros y esto se resuelve con más salud, educación, salarios dignos y más empleo.
Desde la Corriente Socialista El Militante saludamos esta jornada de paro y movilización nacional ya que consideramos que con el método y programa correcto de los trabajadores podremos enfrentar la crisis que generaron los capitalistas.
Creemos también que es necesario, como muchos de los dirigentes de la CTA han señalado, que esto es un escalón más en una serie de medidas a desarrollar, -plan de lucha- si no se logran las demandas planteadas.
Es verdad también que, siendo correctas las banderas levantadas, estamos convencidos que debemos señalar que la crisis no la paguen los trabajadores, la misma debe ser pagada por las multinacionales, los banqueros, la burguesía agraria, que los despidos se los puede prohibir solamente con una relación de fuerzas que nos sea favorables en las calles y las fábricas.
Y también estamos convencidos que la misma está de nuestro lado. Pero esta relación de fuerzas favorable radica en el papel que juegan los jefes sindicales de la CGT con su política de conciliación de clases, que radica en el nuevo Pacto Social que ha pergeñado el gobierno de Cristina Fernández con Moyano y cia. y que genera un profundo odio de nuestra clase.
En el último encuentro de los jefes de la CGT con el gobierno, aquéllos mostraron el papel conciliador con los intereses de las multinacionales, y de los patrones nacionales o extranjeros. Y como recompensa por su papel en las filas de nuestra clase, por su política de podredumbre, se beneficiaron con una suculenta suma de nada más y nada menos de 13 millones de dólares anuales con los fletes de conteiner, ya que reciben 17 dólares por cada uno.
Es por esto que siendo una medida necesaria y correcta la convocada por la CTA, creemos que debe profundizarse. No solamente en el plan de lucha, sino además en la convocatoria a todos los trabajadores. La crisis, más que nunca, impone la Unidad de abajo hacia arriba de los trabajadores y por esto debe apelarse desde la CTA y la Constituyente Social a que los trabajadores y los dirigentes de la CGT se sumen a este paro y movilización en defensa de los puestos de trabajo, contra de los despidos, por aumento salarial y a coordinar de ahora en más otras medidas que iremos construyendo para que la crisis la paguen quienes la generaron.
Esta es la manera de desnudar el carácter de esta repodrida dirección de la CGT y ayudar a los activistas y delegados honestos a que puedan superar los obstáculos que impone la burocracia.
