La CGT, que había anunciado a principios de octubre la convocatoria de una huelga general en la Comunidad de Madrid para enfrentar la crisis del Covid-19 y su mala gestión por el gobierno de Ayuso, finalmente ha fijado la fecha de la misma para el 11 de noviembre. Desde Lucha de Clases apoyamos esta iniciativa y llamamos a UGT y CCOO, además de todas las organizaciones obreras, estudiantiles y vecinales, a sumarse.
La gestión de la pandemia en Madrid por parte del gobierno regional de PP y Cs, con el apoyo de Vox, es un desastre total. Hay 10.059 muertos acumulados en la comunidad autónoma, 530 personas hospitalizadas en los últimos 7 días y 283.130 casos positivos detectados con pruebas PCR. Claramente, las medidas de confinamiento selectivo no funcionaron, ni tampoco el estado de alarma de 15 días ha doblegado la curva que es el enfoque principal del ministerio de sanidad.
Frente a estas cifras, y la falta de medidas efectivas para priorizar las vidas de la población más vulnerable y desfavorecida en la Comunidad, hay todavía una necesidad urgente para esta huelga general. Hay que reconocer la iniciativa correcta del sindicato CGT de llamar a una huelga y pedir que se sumen los sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO. La falta de respuesta de las direcciones de estos sindicatos probablemente ha causado dudas entre los dirigentes del CGT, de ahí que hayan dilatado la puesta de una fecha de convocatoria. Pero hay tiempo para seguir exigiendo una respuesta y, mientras tanto, se puede coordinar la convocatoria de una huelga general con movilizaciones populares y huelgas parciales, que sería una iniciativa que recibiría apoyo de los docentes, los trabajadores sanitarios, los trabajadores del sector del transporte y de los barrios y ciudades obreras del sur y del este de la Comunidad de Madrid. Las asociaciones vecinales que impulsaron múltiples movilizaciones al final de septiembre deben exigir que se sumen UGT y CCOO a la huelga general, y deben tomar iniciativas para coordinar nuevas manifestaciones en sus barrios para seguir con las reclamaciones populares todavía no cumplidas. Una huelga general de 24 horas, coordinada por comités vecinales, para exigir esas reivindicaciones y demandar la dimisión del gobierno de Ayuso es todavía de suma importancia para la protección de la salud de los barrios obreros y para controlar la difusión del virus por la Comunidad de Madrid.
Entre las reivindicaciones a exigir, que podrían contemplarse junto a otras, destacamos las siguientes:
- Defender una sanidad 100% pública. Paralización de cualquier intento de privatizar los servicios públicos, especialmente los del ámbito sanitario.
- Pruebas PCR masivas de al menos 2 miembros por unidad familiar, y mascarillas gratis para la población.
- Intervención y nacionalización del sistema privado de salud (que son regados con fondos públicos) para hacer frente a la emergencia sanitaria y así garantizar su uso de toda la sociedad. Esta medida se promulgó desde el Gobierno Central en el anterior confinamiento, pero se dejó en manos de las Comunidades Autónomas, que poco o nada hicieron. ¡Debe hacerse efectiva!
- Contratación de los rastreadores necesarios sin recurrir a empresas privadas (ya que no es más que otra estrategia para desviar dinero público a las empresas amigas del PP)
Priorizar los fondos públicos para la contratación del personal sanitario necesario para no colapsar las urgencias ni los ambulatorios. Es necesario reforzar las plantillas si queremos evitar males mayores. - Duplicación de la frecuencia del metro, autobuses urbanos e interurbanos, y trenes de cercanías; contratando a los trabajadores necesarios. Esta será la única manera de asegurar una distancia social conveniente para viajar seguros.
- Cierre durante 15 días de toda actividad económica, salvo servicios esenciales decididos por los propios trabajadores, que los patrones se hagan cargo del salario de los trabajadores.
- Dimisión del gobierno de Ayuso PP-C’s-Vox y disolución de la Asamblea de Madrid.
- Convocatoria de elecciones anticipadas en la Comunidad de Madrid.
