Este martes 29, en medio de una fuerte movilización popular, comenzará en el Tribunal Oral Nº2 de La Plata el juicio contra Gabriel Roser, un joven piquetero preso desde el 29 de abril de 2004 en el Penal de Magdalena, acusado de un crimen que nuncacometió, en una causa armada por la policía y punteros del PJ, y convalidada por la Justicia bonaerense. A continuación, las actividades y la información relacionada con el juicio. Este martes 29, en medio de una fuerte movilización popular, comenzará en el Tribunal Oral Nº2 de La Plata el juicio contra Gabriel Roser, un joven piquetero preso desde el 29 de abril de 2004 en el Penal de Magdalena, acusado de un crimen que nunca cometió, en una causa armada por la policía y punteros del PJ, y convalidada por la Justicia bonaerense. A continuación, las actividades y la información relacionada con el juicio.
Lunes 28:
12.00 hs. Conferencia de prensa en H.I.J.O.S (Venezuela 821, Capital), a cargo de:
*Elida Silvero (madre de Gabriel)
*Dra. Sofía Caravelos (abogada de Gabriel)
*Integrantes del Frente Popular Darío Santillán
La misma contará con la presencia de Madres de Plaza de Mayo (Línea Fundadora), SERPAJ, H.I.J.O.S., Colectivo de Investigación y Acción Jurídica (CIAJ) y diferentes personalidades de organismos de derechos humanos.
Martes 29:
-10.30 hs. Movilización de diferentes organizaciones populares desde la estación de La Plata hacia los Tribunales, ubicados en calle 8 entre 56 y 57.
-17.00 hs. Inicio de jornadas culturales que se extenderán durante todo el juicio.
¿Quién es Gabriel Roser?
Gabriel tiene sólo 27 años de edad y es uno de esos tantos pibes desocupados que habitan las barriadas humildes del Gran Buenos Aires. Como tantos otros jóvenes herederos del desastre neoliberal que sacudió al país en los ´90, Gabriel se sumó al Movimiento de Unidad Popular (MUP), integrante del Frente Popular Darío Santillán, para buscar una alternativa a esta situación de miseria y exclusión. Allí trabajaba en una huerta comunitaria y en un comedor que se instaló al lado de su casa, lugar donde decenas de vecinos del barrio Ringuelet de La Plata se juntaban semanalmente a discutir en asamblea mejoras para el barrio y a compartir las esperanzas de lograr un país más justo para todos.
La detención de Roser
El 29 de abril de 2004, un operativo compuesto por seis patrulleros y casi 20 policías rodearon la casa de Roser, ubicada a orillas del arroyo “El Gato” en el barrio de Ringuelet (La Plata). Con orden de allanar la vivienda en busca de $980 en efectivo, un teléfono celular, dos relojes marca Rolex y armas de fuego, los uniformados procedieron con la requisa del lugar. Al no encontrar ninguno de los elementos denunciados, ingresaron ilegalmente al comedor popular del MUP (ubicado al lado de la casa de Gabriel) generando destrozos que inutilizaron el uso habitual del mismo que alimenta a casi 100 familias sin empleo.
Fruto del operativo, Gabriel fue finalmente detenido. Comenzaba de esta manera el calvario para el joven desocupado.
El armado de la causa
El 24 de abril de 2004, dos hombres armados y un tercero que aguardaba en un automóvil asaltaron el supermercado Simar, ubicado en la esquina de la calle 12 y 156 de La Plata.
Al darse a la fuga, Marcelo Rodolfo Toni, dueño del supermercado y sargento de la policía de la provincia, los persiguió varias cuadras sin lograr aprehenderlos. Por una cuestión de jurisdicción, Toni radicó la denuncia en la Comisaría 6ª de Tolosa, declarando no poder haber reconocido a los asaltantes.
Una semana antes de su detención, Roser había sido demorado por averiguación de antecedentes por miembros de la Comisaría 6ª, quienes en esta ocasión le tomaron fotografías para ser guardadas en las carpetas de modus operandi (prontuario policial) o comunmente llamado “álbum de mal vivientes”.
Misteriosamente, dos días después del robo el damnificado Toni declaró en una sede judicial que sí podía reconocer a los asaltantes de su comercio. Sólo bastó con volver a la 6ª de Tolosa para que sus colegas le mostraran la fotografía de Roser y poder así señalarlo en la rueda de reconocimiento como el autor del delito.
Con la excusa de averiguación de identidad, la policía “demora” y fotografía a todos aquellos que por sus cualidades físicas o circunstancias sociales puedan a su criterio ser autores de un delito en el futuro.
La complicidad de la Justicia y el poder político
Como se pudo verificar tiempo después, el robo efectivamente existió y de hecho Roser, junto a un grupo de amigos, fue testigo de la persecución que Toni emprendió contra los asaltantes, pero la diferencia yacía en que el verdadero responsable del hecho era el hijo de un puntero de PJ local de excelentes vínculos policiales. A pesar de saber la verdad, Toni insistió en acusar a Gabriel de un crimen que no cometió. Su condición de pobre y piquetero fueron determinantes a la hora de poner a andar el armado de la causa que lo llevo a prisión.
Para la detención de Roser sólo bastó con una rueda de reconocimiento adulterada, en la que Toni y un amigo personal, integrante de la misma fuerza de seguridad, señalaron a mano alzada a Gabriel como responsable de los hechos, mientras que el tercer testigo ofrecido por el querellante (que no pertenece a ninguna fuerza) no lo pudo reconocer como el autor del delito. Tampoco se encontraron las armas ni los objetos robados.
El rol de sistema judicial fue decisivo a la hora de sustentar el armado de la causa. Al Fiscal Marcelo Eduardo Martini, titular de la UFI 3 encargada de la instrucción de la causa y responsable de pedir la detención de Gabriel, no le llamó la atención las contradicciones de Toni. El Juzgado de Garantías Nº3, a cargo de Néstor De Aspro, dictó la prisión preventiva de Gabriel a pedido del Fiscal, mientras la Defensora Oficial que lo asistía nada hacía, siendo los compañeros de Gabriel quienes acercaron los nombres de los testigos. Martini no se preocupó en ubicarlos y elevó la causa a juicio.
La Sala II de la Cámara de Apelaciones con la firma de los jueces Ricardo Szelagowsky y Sergio Almeida denegó en tres ocasiones el pedido de excarcelación para que espere el juicio oral en libertad.
El juicio y la presión popular
A partir del 29 de noviembre y por cuatro días seguidos se realizará el juicio oral y público contra Gabriel Roser, imputado en la causa caratulada como robo calificado por uso de arma de fuego, que consta de una condena de seis años de prisión. Gracias a la presión ejercida durante este último tiempo a partir de las movilizaciones, las acciones de sus abogados y la solidaridad internacional, el juicio que inicialmente había sido previsto por el Tribunal para fines del 2006 se realizará esta semana en el medio de una masiva movilización de reclamo por la inmediata libertad del militante social.
La defensa de Roser estará a cargo de la Dra. Sofía Caravelos, integrante del Colectivo de Investigación y Acción Jurídica (CIAJ), espacio que nuclea abogados de derechos humanos, quienes vienen apadrinando casos vinculados a la criminalización de la protesta social, gatillo fácil y represión policial.
Para mayor información:
Elida Silvero (madre de Gabriel): 0221 489 1195
Dra. Sofía Caravelos (abogada de Gabriel): 0221 15 5 418 686
Frente Popular Darío Santillán: 155-738-9035 (Laura Cibelli) – 155-489-1374 (Pablo Solana)