Venezuela: A un año de los asesinatos de los camaradas José Marcano de MMC Automotriz y Pedro Suárez de Macusa

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Hace un año fueron los asesinatos de los camaradas JOSÉ MARCANO DE MMC AUTOMOTRIZ y PEDRO SUÁREZ DE MACUSA a manos de la policía de Anzoátegui. Los camaradas de MMC Automotriz han luchado fuertemente contra la tercerización en MMC Automotriz, pidiendo que esta vil práctica cuartorrepublicana se acabe de una vez por todas.

Hace un año fueron los asesinatos de los camaradas JOSÉ MARCANO DE MMC AUTOMOTRIZ y PEDRO SUÁREZ DE MACUSA a manos de la policía de Anzoátegui. Los camaradas de MMC Automotriz han luchado fuertemente contra la tercerización en MMC Automotriz, pidiendo que esta vil práctica cuartorrepublicana se acabe de una vez por todas.

Lo vimos el año pasado cuando la gerencia de MMC decidió acabar con el contrato que tenía con la empresa Induservis. De manera correcta, los camaradas del sindicato de MMC llamaron a una reunión y decidieron, en asamblea, ocupar la planta ensambladora en solidaridad con los trabajadores de Induservis. Estos hechos desmontan el repetido discurso de los reformistas y burócratas, quienes dicen que la clase obrera no tiene conciencia. Por el contrario, lo que hemos visto durante el último año ha sido un alto nivel de conciencia de clase y de combatividad por parte de los trabajadores de MMC Automotriz.

La lucha de los trabajadores de MMC es la justa lucha que igualmente llevan millones de trabajadores en todo el país; la lucha contra la tercerización de la mano de obra, donde los trabajadores tercerizados no tienen el justo derecho a seguro social, aumento de salarios, bonos, vacaciones y otros beneficios. Esto no sólo lo vemos en empresas privadas del sector automotriz como General Motor’s, Toyota, Ford, Chrysler, sino en empresas del estado como SIDOR, PDVSA, Venalum y otras.

Los camaradas de MMC, Vivex y Macusa han logrado mostrar al conjunto de la clase obrera del país un modelo de sindicato donde los trabajadores de base participan activamente en las decisiones de la organización. Este modelo de sindicato debe extenderse al conjunto de las empresas privadas y estatales, acompañando esta lucha con la permanente movilización de los trabajadores. Nosotros, militantes de la Corriente Marxista Internacional, hemos llevado a cabo una fuerte campaña en solidaridad con los camaradas de MMC y de Vivex. Hacemos un llamado a que todos los trabajadores apoyen esta lucha.

La próxima Ley Orgánica del Trabajo (LOT) debe servir para dar más beneficios y poder a los trabajadores, para acabar definitivamente con la lacra de la tercerización, luchar por la mejora en los ambientes de trabajo con la supervisión de los Delegados de Prevención y obtener dignos contratos colectivos. Sin embargo, esto no es suficiente. El actual sistema de producción ha llevado a un colapso generalizado de la economía donde millones de trabajadores en el mundo han perdido sus puestos de trabajo. Esto también lo estamos viendo en Venezuela, la crisis capitalista ha llevado al país a la recesión y a llevado a que cientos de trabajadores en el país pierdan sus puestos de trabajo. El capitalismo ha fracasado. La única alternativa la tenemos los trabajadores en nuestras manos. Los trabajadores del país necesitamos más poder, necesitamos controlar el estado a todos los niveles. Y esta digna lucha la están demostrando los camaradas del MMC automotriz, Macusa y Vivex que ya tiene un año ocupada por sus trabajadores.

La lucha por el control obrero

El próximo congreso de la UNT debe servir para fortalecer la central y para consolidar las organizaciones de masas de los trabajadores como los sindicatos. Los sindicatos deben servirnos para luchar por nuestras reivindicaciones transitorias y por el socialismo, a través de la unidad de la clase en torno a la UNT. Pero a la vez, debemos abogar por la conformación de comités de huelga, destacamentos de combate obrero y consejos de fábrica. Como lo hemos visto en las ocupaciones de MMC y Vivex, la ocupación pasa de ser una mera huelga a una lucha por demostrar quien tiene el poder en la fábrica. Es un golpe a la propiedad privada. Mientras los sindicatos luchan por defender los derechos y las reivindicaciones transitórias de los trabajadores de las fábricas, los consejos de fábrica deben servir para organizar el poder obrero en cada una de nuestras empresas. Los consejos de fábrica se convertirán en las células del nuevo Estador. Como hemos visto recientemente en las empresas nacionalizadas, lo que ha hecho el aparato del Estado es reproducirse a través de burócratas impuestos desde los ministerios. Los socialistas abogamos por empresas que sean propiedad del Estado, pero que la producción sea decidida democráticamente por el Consejo de Fábrica, con delegados elegidos y revocables en todo momento.

¿Queremos más viviendas, hospitales, escuelas, centros de recreación y beneficios para los trabajadores? Exigimos que se nacionalice la banca. Solo en el primer semestre de este año los banqueros se embolsillaron más de 480 millones de dólares, mientras tenemos un brutal déficit de viviendas. ¿Queremos mantener y crear más puestos de trabajo? Nacionalicemos la industria. Los industriales han mostrado su carácter parásito durante los últimos años de gobierno del Presidente Chávez, hasta llevar a la casi paralización de la industria. ¿Queremos acabar con la importación de alimentos? Nacionalicemos la tierra. Los trabajadores debemos abogar por la solidaridad con nuestros compañeros campesinos, que han sido víctimas de una ofensiva oligárquica sin precedentes, con más de 300 compañeros asesinados. Si queremos mejorar el problemas de la electricidad en el país, el problema de la asistencia médica es necesario el control obrero de la producción. Los trabajadores debemos organizarnos para tomar definitivamente el poder y demoler el actual aparato de estado. Este es el debate que debemos dar en las patrullas del PSUV.

El PSUV

Para poder consolidar nuestras reivindicaciones es necesario contar con un PSUV que responda a los intereses de la clase obrera. La actual política de “alianzas estratégicas” con una parte del patronal ha demostrado ser un fracaso. Los trabajadores del PSUV debemos organizarnos con el comandante Chávez al frente, discutir como militantes de base, crear y consolidar puentes con la juventud del partido, con el movimiento de mujeres trabajadoras, con los campesinos. El PSUV es un partido en construcción que debe convertirse en un partido revolucionario, en un partido obrero de masas.

Debemos explicar pacientemente nuestro programa (nacionalización de la banca, de la tierra, de la industria, control obrero de la producción, abolición del aparato de estado) al conjunto de la militancia del PSUV y derrotar definitivamente a la burocracia que sigue enquistada en el aparato de estado y que ahora trata de tomar el control del partido. El actual Congreso del PSUV debe convertirse en una oportunidad para que los trabajadores marxistas logremos ganar más camaradas para nuestro programa.

Las sectas de extrema izquierda plantean crear “partidos” y organizaciones fuera de las organizaciones de masas de la clase obrera. Esta es una idea totalmente equivocada. Debemos mostrar pacientemente al conjunto de la militancia revolucionaria que nuestro programa es correcto. Nuestra consigna debe ser: ¡Romper con la burguesía, tomar el poder!

¡Viva la lucha de los camaradas de MMC, Vivex y Macusa!

¡Por la inmediata inserción de los camaradas del Sindicato de MMC Automotriz!

¡Por la nacionalización de Vivex!

¡Por un PSUV sin patronos!

Corriente Marxista Internacional – Venezuela.

Contacto: 0416-8209576 – 0416-3044268 – 0416-8327452.
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