Se ha desatado, de la mano de Pablo Rojo, una furiosa campaña contra los trabajadores de la empresa R.B.I. por haber logrado la expropiación de la planta para recuperar la fuente de trabajo, volver a ponerla en funcionamiento al servicio de la producción nacional e integrar su puesta en marcha con los intereses de la comunidad de San Martín.
En el diario Perfil y Ámbito Financiero, el Sr. Rojo acusó a los trabajadores de usurpadores, ladrones y delincuentes y amenazó al Gobernador de la Pcia de Buenos Aires con iniciar acciones legales contra la Provincia si no veta la ley de expropiación aprobada por unanimidad en ambas cámaras, afirmando una serie de mentiras como que la fábrica estaba funcionando y se pagaban los salarios.
En el acta del 06/02/2012 la UOM y ASIMRA intiman a R.B.I. y al “tercero interesado” (Sr. Marcelo Lenarduzzi – supuesto comprador de las plantas del grupo) a “el pago de todo lo adeudado hasta el día de la fecha” y el 09/02/2012 en otra acta firmada en el Ministerio de Trabajo de la Pcia de Buenos Aires “se señala que la planta de R.B.I. permanecerá sin actividad hasta tanto se consiga un soporte de producción . . .” y se intima al Sr. Pablo Rojo con fecha 06/02/2012 a “comparecer en su condición de Presidente de RBI bajo apercibimiento de ley”.
En otra acta de fecha 16/02/2012 la UOM manifiesta que “adjunta al expediente dos listados donde quedan asentados el retiro de documentaciones, como asimismo máquinas de oficina que se retiraron el 14 y 15 de febrero de 2012 de la planta de RBI por solicitud del Sr. Lenarduzzi” y este manifestó “que los elementos detallados en los listados presentados por la UOM fueron retirados previo aviso al personal, y han sido instalados momentáneamente en otro espacio físico cedido por esta parte en virtud de que el lugar de original (RBI) carece de luz eléctrica, Internet, etc.”
A confesión de parte, relevo de pruebas. El Sr. Pablo Rojo miente deliberadamente, y estas mentiras son apenas la punta del iceberg de todas las falsedades que declaró y que los diarios en cuestión no se tomaron la molestia de verificar.
Estos señores han estafado a los trabajadores y mentido a las autoridades laborales de la Provincia. Han cometido fraude laboral en connivencia con el Grupo Bosch en perjuicio de los trabajadores, su objetivo era el vaciamiento de la fábrica, como hicieron con otra empresa del grupo Río Bravo, la metalúrgica Argelite y flaco favor le hacen a la UOM jactándose de su apoyo, porque colocan a los que tienen que representar a los trabajadores metalúrgicos junto a un exponente fiel de las políticas que desindustrializaron la Argentina.
Por todo esto, a los trabajadores no nos ha quedado otro camino que recuperar la fábrica con el único objetivo de volver a trabajar y poner al servicio economía nacional tan importante fuente de trabajo, por eso solicitamos el justo derecho a replicar tamañas mentiras en nuestra contra que alcanzan a los legisladores provinciales, a las autoridades municipales que han apoyado nuestro esfuerzo y a muchas organizaciones gremiales, sociales y políticas que se solidarizaron con nuestra lucha.