La Corriente Socialista Militante, sección argentina de la Corriente Marxista Internacional, se solidariza con los camaradas del Partido Comunista de la Argentina ante el ataque y la vandalización, a las Baldosas de la Memoria en la puerta del local del Comité Capital en Callao 274, que recuerda a las compañeras y compañeros del partido detenidos-desaparecidos el 20 de mayo de 1977, por parte de la patota de Aníbal Gordon, que respondía a la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) en el marco del Plan Cóndor.
Este ataque cuenta con un nefasto precedente impune, cuando el lunes 4 de septiembre tres sujetos dejaron tres bombas molotov listas para usarse, justo frente a la puerta de la sede del mismo Comité.
Este nuevo intento de amedrentar e intimidar a la militancia del PCA de quienes cobardemente se refugian en el anonimato, tiene como objetivo amenazar al conjunto de las organizaciones políticas de la clase trabajadora y la juventud.
Tenemos que tomar las medidas adecuadas de autodefensa ante cualquier provocación y ataques de grupos de extrema derecha.
La reacción venía envalentonada de cara a la definición de las elecciones presidenciales. Con el triunfo de Milei este envalentonamiento cobrará más fuerza y virulencia. Los sectores negacionistas, que son las fuerzas económicas, políticas y sociales históricamente vinculadas a la dictadura genocida, intentaran avanzar en garantizar la impunidad de los crímenes de lesa humanidad y en reforzar el aparato represivo del Estado para hacer pasar el ajuste que exigen empresarios, banqueros y terratenientes para asegurar sus ganancias.
A la derecha hay que derrotarla en las calles con organización, movilización y la preparación de la huelga general. Como hemos señalado con anterioridad no es posible hacerlo por vía electoral apoyándose en los partidos del régimen y sus instituciones. Debemos confiar en nuestras propias fuerzas.
Todos los enemigos declarados de la clase trabajadora, todo lo que hay de atrasado, opresivo, oscuro y reaccionario en la sociedad capitalista, buscan pasar a la ofensiva creando un clima de miedo y reacción. “Vamos a ser implacables” declaro Milei en su discurso como presidente electo.
La clase obrera y la juventud debemos movilizarnos enérgicamente por cientos de miles en defensa de nuestros derechos democráticos y condiciones de vida, así toda la bravuconería reaccionaria se vería obligada a retroceder. De lo contrario, las fuerzas de la reacción van a crecer.
Nos solidarizamos de manera consciente, política y activa, señalando la necesidad de construir un partido revolucionario para el derrocamiento del régimen capitalista, esta es la única manera de ponerle un freno definitivo a estas amenazas ya que la lucha por una democracia plena en nuestro país va de la mano con la lucha contra el capitalismo, la lucha por la transformación comunista de la sociedad. Donde la clase trabajadora tome el poder y tenga un gobierno propio.