5ª Causa: "Por la reconstrucción de las industrias y servicios públicos, la promoción científico-técnica y la integración autónoma de América Latina"
La 5ª Causa establece la promoción de un proyecto alternativo al modelo agro-minero-exportador en base a la reindustrialización del país, e impulsando el desarrollo de un bloque económico y político latinoamericano.
5ª Causa: "Por la reconstrucción de las industrias y servicios públicos, la promoción científico-técnica y la integración autónoma de América Latina"
La superación del modelo agro-minero-exportador y sus equivalentes en la región, es decir la superación del papel de economías dependientes dentro del sistema económico mundial requiere mucho más que una voluntad política de cambiar el "modelo". Este "papel" está marcado a fuego y es la contratara de las economías desarrolladas e imperialistas, que resistirían violentamente. El cambio de "papel" en la economía mundial no puede entrañar cambios progresivos en vías de un desarrollo "autónomo" nacional y regional.
Hay otras razones, como que las economías pequeñas llegaron tarde a la cita con la historia, cuando el mapa mundial quedó configurado y el botín repartido con los flujos de materias primas por un lado y productos industriales por el otro. El cuento del desarrollo capitalista para las economías periféricas es solo eso, un cuento.
Así y todo la propuesta de crear un Polo de Empresas Públicas de carácter Industrial y de Servicios es un paso adelante en la reversión del proceso privatizador. Y solo podría conseguirse si, al primer paso, le agregamos los siguientes; es decir, la nacionalización de todas las palancas estratégicas de la economía: las industrias básicas, la tierra, la banca, ya sean propiedad de capitalistas extranjeros o nacionales, a fin de planificar un desarrollo nacional y bajo el control democrático de sus trabajadores y de conjunto de la sociedad.
Latinoamérica, con su valioso antecedente, el ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), que conforman Venezuela, Cuba, Bolivia, Ecuador, Nicaragua y pequeñas islas caribeñas, podrá avanzar en un verdadero proceso de Integración "capaz de transformarnos en reales protagonistas de nuestra historia" en el caso de establecer una Federación Socialista latinoamericana que partiendo de los procesos revolucionarios mas avanzados (Cuba y Venezuela), profundice los cambios (nacionalizando las palancas fundamentales de la economía y poniéndolas bajo control obrero), fuera integrando a los de Bolivia y Ecuador, y se extendiera a los de Nicaragua, El Salvador y otros.
Una integración así planificaría toda la economía regional en base a las riquezas de cada país y satisfaga las necesidades populares de todos los pueblos sin que intervengan intereses empresariales ni del aparato militar imperialista.